El Museo de Santa Clara cobra forma

            Tal como anunciamos, tras la instalación de las oportunas medidas de seguridad, ayer comenzaron a ubicarse, en sus respectivos emplazamientos, las obras que serán expuestas en el nuevo museo del convento de Santa Clara.

            Aunque quedan todavía muchas actuaciones pendientes, antes de proceder a su inauguración, hemos querido ofrecer estas fotografías para que nuestros lectores puedan hacerse idea de la estructura y contenidos del museo.

            Consta de siete salas, distribuidas en dos alas que se diferencian por el color del panelado, azul en la primera y violeta en la segunda. Por otra parte, se alternan en cada sala las tonalidades de cada gama, consiguiendo un efecto más llamativo.

            Faltan por instalar vitrinas, en algunas salas, para exponer documentos y libros, entre ellos, los cantorales a los que hicimos referencia en un artículo anterior. También está pendiente de colocar los focos de iluminación de cada obra, así como la rotulación de las mismas y los paneles explicativos de cada sala.

  

          En cualquier caso, el avance ha sido considerable en las últimas semanas y el resultado alcanzado es bastante aceptable, teniendo en cuenta que este museo ha ido avanzando, sin un presupuesto previo, merced a las aportaciones de diversas personas, entidades e instituciones que han apoyado esta importante iniciativa de la comunidad de religiosas de Santa Clara.

El convento que destacó, en el pasado, por la formación cultural de algunas de sus religiosas, ha querido ahora poner su patrimonio artístico, reunido en el transcurso del tiempo, al servicio de todos a través de este museo que, por otra parte, está impregnado del sentido religioso y del carisma de una orden, fundada hace más de 800 años y cuya presencia en Borja se remonta a los comienzos del siglo XVII.