Agón
celebra hoy la fiesta en honor a la Virgen de Gañarul, una hermosa talla
medieval que se veneraba en la ermita de Gañarul, ahora un despoblado que, en
su momento, fue un coto redondo, del que ese templo era su iglesia parroquial
y, en el que la fiesta se siguió celebrando posteriormente, acudiendo en
romería los vecinos de Agón y los de otras localidades de su entorno.
La
romería se interrumpió en 1965 pero ayer un nutrido grupo de personas
encabezado por el párroco de Agón P. Hernán Suchite y otros seminaristas
pertenecientes a los Misioneros de Betania, acudieron de nuevo a la ermita, por
iniciativa de la asociación creada para la recuperación de este monumento que
tiene la categoría de Bien Catalogado del Patrimonio Cultural Aragonés, siendo
uno de los elementos mudéjares más interesantes de nuestra comarca.
La
romería partió de la plaza de Agón a las diez de la mañana y al llegar a la
ermita, la rondalla de Mallén ha interpretado varias jotas. No han faltado
personas que las bailaran y algún espontáneo cantó “La Magallonera” y otras jotas
de nuestra tierra. Fue un momento emotivo, ver recobrar una tradición a la vera
de las ruinas de un precioso poblado que, en su momento, se pudo haber conservado.
Más lo
fue, cuando D. Hernán Suchite rezó una oración por todas las personas
fallecidas que vivieron y murieron en Gañarul, como esta familia que fue una de
las últimas residentes allí, aunque algunos de ellos aún viven.
Al
final se sirvió un aperitivo con vinos y pastas, sobre la mesa dispuesta al
efecto sobre las que podían verse algunas piezas de alfarería con el logotipo
de esa combativa asociación que se ha propuesto salvar el monumento
Hace pocos días, la
Concejal del Ayuntamiento de Agón, la Dra. Dª María del Carmen Ruiz Marcellán,
nos entregó este boceto, realizado a la acuarela por su hermana Pilar, en el
que aparece la imagen de la ermita, ya rehabilitada, un sueño por el que está
luchando con tesón desde hace varios años, sabiendo que cuenta con el apoyo de
los miembros de su asociación y de otras muchas personas, entre las que nos
incluimos, porque “Hay que salvar Gañarul”.
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