sábado, 27 de octubre de 2018

Curioso documento relacionado con la Guardia Nacional


         En el archivo de la familia Sánchez del Río, donado a nuestro Centro, que en la actualidad está catalogando D. Antonio de Pedro, ha aparecido este curioso billete de un sorteo organizado por el “Segundo Excuadron” de la Guardia Nacional de la provincia de Zaragoza. El premio era de “dos yeguas, con una potra” de la yeguada el duque de Villahermosa que correspondería al número que coincidiera con el premio mayor del primer sorteo de la Lotería Nacional de octubre de 1836.

         Al margen de la singularidad del premio, el documento aporta datos interesantes dado que cita a la “Guardia Nacional”, a su “segundo escuadrón”, lógicamente de caballería, y al año 1836, lo que nos permite comentar estos detalles.




         El siglo XIX fue especialmente convulso por los enfrentamientos por absolutistas y liberales, primero, y progresistas y moderados, después.
         Tras la promulgación de la primera Constitución española surgida de las Cortes de Cádiz, fue creada una Milicia Nacional que fuera garante de los ideales que inspiraban el nuevo régimen. Fue en la década de los años 20 de ese siglo cuando el nuevo cuerpo se fue consolidando.

         Estaba integrado por ciudadanos que, con carácter voluntario y sin abandonar sus ocupaciones habituales, recibían una formación castrense los domingos y días de fiesta, integrándose en los batallones de infantería y los escuadrones de caballería creados al efecto. Debían costearse el uniforme, siéndole facilitado el armamento por los ayuntamientos respectivos que, inicialmente podían ser cualquiera y, más tarde, quedaron circunscritos a los de las capitales de provincia y las cabezas de Partidos Judiciales. En Zaragoza, fue creada en 1820 y llegó a contar con una unidad integrada por niños.





         Tras la restauración del absolutismo, con la entrada en España de cuerpo expedicionario francés, conocido con el nombre de los “Cien mil hijos de San Luis”, la Milicia Nacional fue disuelta, siendo reemplazada por un cuerpo de características similares que se llamó “Voluntarios realistas”, que se mantuvo en vigor durante toda la “Década ominosa”.




         Pero, tras la muerte de Fernando VII, los voluntarios realistas son disueltos el 25 de octubre de 1833 y, en las diferentes ciudades son reemplazados por los “Voluntarios de Isabel II” que se integraron en la “Milicia Urbana”, creada por un decreto de julio de 1834, siendo Presidente del Gobierno D. Francisco Martínez de la Rosa.



         El 25 de septiembre de 1835 se hizo cargo de la Presidencia del Gobierno D. Juan de Dios Álvarez Mendizábal, tras los efímeros mandatos de D. José María Queipo de Llano y D. Miguel Ricardo de Álava, que habían sucedido a Martínez de la Rosa.

         El 27 de noviembre de 1835, el nuevo Presidente reorganizó la Milicia Nacional, transformándola en la “Guardia Nacional”. De ahí que el boleto del sorteo que ha dado origen a este comentario, fuera distribuido al año siguiente de su creación. Sin embargo, estas fechas, dadas a conocer por algunos autores deben ser cuestionadas por las razones que seguidamente expondremos.




         Porque, en febrero de 1835, se publicó en Zaragoza un folleto titulado Discurso que en la bendición de banderas y estandarte de los tres batallones de Infantería y escuadrón de Caballería de la Guardia Nacional de Zaragoza, pronunció en el 19 de Noviembre día de nuestra legítima Reina Doña Isabel II, en el santo templo metropolitano del Pilar, del que era autor el presbítero D. Policarpo Romea, que viene a demostrar que el 19 de noviembre de 1834 ya se utilizaba en la capital aragonesa la denominación de Guardia Nacional.
         Por otra parte, en una vitrina de la Casa Consistorial de Zaragoza se conserva un estandarte de la Guardia Nacional, bordado en terciopelo azul oscuro, que está datado en 1838, lo que nos plantea también la duda de si no sería el entregado al escuadrón de Caballería en 1834. Sin embargo, el hecho de que en el billete del sorteo encontrado en Borja se mencione expresamente a un “segundo escuadrón” demuestra que, con posterioridad se creó otro, al que pudo corresponder el estandarte conservado en el ayuntamiento zaragozano.
         Otro recuerdo de la Guardia Nacional es la obra cuya portada reproducimos, titulada Compendio de la táctica de Infantería de línea y ligera... de la Guardia Nacional que escribió D. Miguel Sánchez, siendo publicado en Zaragoza en 1835, lo que corrobora que la utilización de esa denominación es anterior.
         La Guardia Nacional volvió a ser conocida como “Milicia Nacional”, en años posteriores, pero de su evolución y del papel desempeñado en la defensa de los principios liberales no nos ocuparemos, por exceder el propósito que hoy nos habíamos fijado al dar a conocer el billete encontrado en un archivo de nuestra ciudad.

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