Dª.
Eva Frago Corao que se encontraba viajando, de nuevo, a Florencia, nos remitió
ayer unas imágenes de una interesante tradición que Fuendejalón, mantiene en
torno a la fiesta de San Juan, Patrón de esa localidad.
Se
trata de las enramadas que, en la víspera del Santo, se colocan en la puerta de
determinadas viviendas. En su origen,
eran los mozos quienes colocaban flores o cardos borriqueros a las puertas de
las chicas por las que estaban interesados. Lógicamente, las flores iban
destinadas a aquellas que les correspondías, mientras que los cardos se
colocaban en las casas de las que los rechazaban.
Posteriormente,
se convirtieron en un motivo de broma y aunque siguieron colocándose cardos de
forma generalizada, en las fotos que nos ha remitido de este año, no los vemos.
Son ramas y otros enseres los que tapan las puertas. Pero, de una u otra forma,
la tradición persiste.
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