Hemos
localizado y adquirido un nuevo volumen de la revista La Paz Social. En concreto el tomo V, correspondiente al año 1911.
En esos momentos la revista se editaba en Madrid, siendo su director D. Enrique
Reig. Viene a sumarse a los tres primeros volúmenes de la misma que ya existían
en nuestra biblioteca, los de los años 1907, 1908 y 1909. El interés por la
misma radica en el hecho de que fue fundada, en marzo de 1907 por D. Severino
Aznar, objeto de especial atención por
parte del Centro, hasta el punto de que disponemos de una de las mejores
colecciones disponibles de sus obras, entre ellas la de la revista que dirigió.
La
revista había sido creada, como hemos señalado, por D. Severino, junto con D.
Inocencio Jiménez y otros intelectuales católicos, que aparecen en esta interesante
fotografía que nos facilitó su nieta Dª. Blanca Aznar Pérez-Modrego. Se
imprimía en la imprenta de Mariano Salas y, a través de su contenido se
difundió el pensamiento social de la Iglesia.
En
1910, D. Severino fue reemplazado en la dirección por D. Enrique Reig Casanova
(1858-1927) que, en aquellos momentos era Auditor del Tribunal de la Rota en
Madrid, ciudad en la que comenzó a ser editada la revista. En 1914 fue
consagrado obispo de Barcelona y en 1920, se hizo cargo de la sede metropolitana
de Valencia. Dos años después fue creado cardenal y nombrado arzobispo de
Toledo, sede en la que falleció en 1927. Le sustituyó, como director, en 1912
D. Francisco González Rojas, miembro de la directiva del Centro de Defensa
Social de Madrid.
En su
última etapa se hizo cargo de la revista D. Pedro
Sangro y Ros de Olano (1878-1959), IV marqués de Guad-el-Jelú y nieto del
general D. Antonio Ros de Olano. Llegó a ser Director del Instituto Nacional de
Previsión, antes y después de la Guerra Civil, y Ministro de Trabajo y Previsión, en el
gobierno del general Berenguer, en 1930. En 1932, fue elegido Académico de
Número de la Real Academia de Ciencias Morales y Políticas.
La
revista desapareció en agosto de 1914, pero sus contenidos son de suma
importancia para estudiar la labor desarrollada por los propagandistas
católicos en aquella etapa. De ahí el esfuerzo que estamos realizando para
reunir toda la colección de la revista, difícil de consultar en otros lugares y
de la que aún nos faltan tres volúmenes y los ejemplares publicados en 1914. El
volumen ahora adquirido procede de la Academia Calasancia de Barcelona, una
entidad fundada en la ciudad condal, en 1888, por un grupo de antiguos alumnos
del colegio de las Escuelas Pías de San Antonio de Barcelona, la cual dejó de
existir en 1930. Ignoramos adonde fueron sus fondos, entre los que se
encontraba este volumen, ahora puesto a la venta.
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