En El Diario de Huesca
de 19 de abril de 1905 hemos encontrado la siguiente noticia: “El Dr. D. Lázaro
Bauluz, deán de la Iglesia Metropolitana de Zaragoza, ha donado para el culto
de la parroquial de Magallón, su pueblo natal, un magnífico terno de tisú plata
fina briscada el fondo, bordado de oro a relieve”.
El terno fue confeccionado en la fábrica “Justo Burillo y
Comandita” de Valencia, por un precio de 12.000 pesetas, cantidad importante
para la época. La fábrica era entonces una de las más prestigiosas de España en
el sector. Su propietario era natural de Alfajarín y fue galardonado con
premios en la Exposición Hispano Francesa de 1908 y en otras importantes
muestras de Valencia.
Creemos que estas imágenes que fueron publicadas en la obra Magallón. Patrimonio Artístico Religioso I,
pueden corresponder al terno regalado, aunque en ella no se hace mención a su
origen, ni por el momento, estamos seguros de que sea así.
D. Lázaro Bauluz y Bea, había nacido en Magallón en 1825.
Era hijo de D. Felipe Bauluz y Sanz de Villaragut, miembro de una destacada
familia de infanzones, y de su segunda esposa Dª María Bea, perteneciente a la
familia propietaria de la pardina de Gañarul. Tras cursar los estudios
eclesiásticos, inició una brillante carrera en la que llegó a ser distinguido con
la dignidad de Prelado Doméstico de Su Santidad y Protonotario Apostólico.
Profesor de Filosofía y Derecho Canónico, ejerció como Secretario de Cámara de
tres arzobispos de Zaragoza. Obtuvo después una plaza de canónigo en la
catedral de Barcelona, donde fue elegido Arcediano del cabildo. Finalmente,
pasó como canónigo a la Seo zaragozana, siendo elegido Deán de su cabildo. Se
da la circunstancia de haber sido el último deán que residió en el hermoso
palacio existente tras la Seo, restaurado más tarde por la actual Ibercaja.
Tras
su jubilación se retiró a Magallón, donde era conocido como “el deán”, residiendo
en la casa que tenía, junto al convento de dominicos y frente a la casa de los
Pérez Cistué. No mantenía tratos con el resto de su familia, a raíz de un
pequeño incidente con el hijo de su hermanastro, al que hizo “guardar antesala”
cuando fue a visitarle a Zaragoza, detalle que no le perdonaron. Por este
motivo, el deán dejó todos sus bienes a sus caseras. Falleció el 3 de mayo de
1906, un año después de la donación del terno. Está enterrado en el cementerio
de Magallón y en la lápida hizo constar todos sus títulos y dignidades. D.
Elisardo Pardos Bauluz, que nos facilitó todos estos detalles, nos comentó
también que el farol del Rosario de Cristal de Zaragoza que lleva el escudo de
Magallón, del que no tenemos imágenes fue sufragado por él.
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