En la plaza de Aguilar, junto a la sede del Centro de Estudios Borjanos se encuentra un edificio, propiedad del Ayuntamiento de Borja, en estado ruinoso, a la espera de su rehabilitación, cuya fachada ofrece elementos de interés que queremos resaltar.
Edificado, posiblemente, en el siglo XVII, conserva en su
planta superior, una galería tapiada de grandes vanos rectangulares y, en la planta
baja, se adivina el arco de ladrillo de medio punto que, en su origen, daba
acceso al interior.
No menos
interés tiene el pontete que lo une con el edificio contiguo y bajo el que se
accede a un estrecho callejón (sin nombre) que conduce a la calle de San
Bartolomé. Estos elementos constructivos han ido desapareciendo en varias
localidades de nuestra zona y, en Borja, hay otras en la Morería, cuyo estado
dista de ser óptimo.
Pero queremos
llamar, especialmente, la atención sobre el balcón de su fachada. Es el único
de madera, sobre zapatas del mismo material que se conserva en Borja. siendo
también de interés los barrotes de metal torneado.
En la Corona
hubo una bonita galería con balaustrada y soportes de madera, que fue, durante
mucho tiempo, una imagen emblemática de la ciudad, reproducida en numerosas
fotografías.
Lamentablemente,
su aspecto cambió radicalmente, con una desafortunada restauración en la que la
madera fue reemplazada por perfiles metálicos sin ningún interés. Ojalá no
ocurra lo mismo con el que estamos comentando, a la hora de ser restaurado, si
es que antes no se derrumba la casa.
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