El 30 de octubre del pasado año, Pedro Domínguez Barrios nos
dio a conocer un precioso palomar existente en Zuera, ilustrando su comentario
con unas fotografías cuya autor era D. Jesús Nogueras, yerno de los
propietarios del palomar, y que ahora
acaba de enviarle esta nueva imagen que permite apreciarlo con mayor
detalle.
En su opinión, se trata posiblemente de un palomar quizás único
en toda España, afortunadamente bien conservado.
Está
constituido por un prisma troncopiramidal de 8 lados dividido verticalmente en
tres cuerpos que reducen su planta a medida que ascienden. Todo él construido
en mampostería y ladrillo, reservando este para las impostas que separan sus
cuerpos, las graciosas aberturas para el acceso de las palomas, y el alero.
En
el primer cuerpo o base, se localiza el acceso, bajo un cargadero de madera, y
a eje del mismo se alinean los huecos o vanos de sus tres cuerpos. Uno
rectangular en la mitad superior del primero y segundo, y uno en su base de
forma triangular, para acceso de las palomas, en todas sus facetas.
El
tercer cuerpo tiene sobre su arranque o imposta de doble hilada de ladrillo, un
hueco triangular por cara, al igual que el segundo, y también uno rectangular a
modo de galería de arquillos, desde la cual arranca un elaborado alero de
ladrillo, de dos formatos de distinto módulo, dispuestos a doble tizón, cuatro
por cara dejando huecos entre ellos. La cubierta sigue reproduciendo la planta
piramidal del palomar con ladrillo a soga.
Toda una joya de
arquitectura popular.
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