En estos momentos, en los que se va a proceder a la renovación del tejado de la colegiata, queremos llamar la atención sobre un campanil situado sobre él, donde se encuentra la única campana exterior ubicado fuera de las torres.
Se trata de una campana relativamente
moderna instalada para efectuar los toques correspondientes a la misa primera.
Su ubicación, alejada de las torres, permitía que fuera accionada desde la
sacristía, sin necesidad de recurrir al concurso del campanero que se encargaba
del resto.
Bajo
la soldadura efectuada para repararla, puede leerse “DENCAUSSE” por lo que
podemos deducir que fue fabricada en Barcelona por Juan Dencausse, el mismo
fundidor que realizó la del Santuario de Misericordia de Borja y las de otros
lugares, a finales del siglo XIX y comienzos del XX. Esta campana no se
encontraba entre las inventariadas por Francesc Llop.
Aunque,
en la actualidad, la campana no se utiliza, se conserva el sistema de roldanas
por el que discurría el cabo que llegaba a la sacristía, como se aprecia en
esta serie de fotos de Enrique Lacleta.
Pero,
cuando estábamos realizando este reportaje, una vecina de la plaza de Santa
María, muy allegada a la iglesia, nos comentó que también la hacían sonar en
los casos de fallecimientos de “párvulos” o niños, cuyos entierros se
celebraban de “Gloria”, con caja y ornamentos blancos. Aunque, D. Ramón
Borobia, describía el toque de “folías”, que era el dedicado a las muertes de
niños, con las campanas Capitular y Santa Bárbara, nuestra informante insistió
en el impacto que ocasionaba el toque de “folías”, con el campanil que estamos
comentando, dado que, como fallecían muchos menores de edad, en aquellos
tiempos, la pequeña campana sonaba con cierta frecuencia. No hemos podido
constatar con otras fuentes ese uso, pero lo mencionamos, esperando que ello
sirva para restaurar y conservar este elemento patrimonial.
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