Nos
acaba de llegar esta foto en la que aparece la comparsa de Gigantes y Cabezudos
en la plaza del Olmo. A nuestro juicio, revista especial interés por la
información que facilita. En primer lugar, se trata de los gigantes que fueron
creados en 1889, con ocasión del centenario de la Virgen de la Peana, pero ya
transformados en rey y reina (originalmente representaban a un hada y a un
nigromante). La imagen hay que situarla, por lo tanto, en los primeros años del
siglo XX.
Al
margen de la comparsa, acompañada por la Banda de Música, es llamativo el
estado de algunas de las fachadas de la plaza. Concretamente, aquí hemos
resaltado el magnífico aspecto que presentaba el edificio donde actualmente se
encuentra la pastelería Jeymar.
Pero
no menos interesante era la pintura de esta otra casa, donde ahora se encuentra
el estanco, en donde puede apreciarse el despiece de ladrillos de un rojo
brillante y los trampantojos con elementos arquitectónicos sobre los vanos.
Desde luego, con estas dos casas pintadas la plaza ofrecería una imagen
radicalmente distinta a la actual.
También
es curiosa la indumentaria de las personas que asisten al paso de la comparsa.
Estamos a comienzos de siglo y los hombres que llevan calzón es muy escaso. De
ahí que siempre hayamos considerado esas fotografías con tipos vistiendo la “indumentaria
tradicional” eran recreaciones intencionadas, aprovechando los últimos
testimonios que quedaban. Aquí, lo que llama la atención es el uso generalizado
de la boina y de una blusa que algunos llevan colgada del hombro izquierdo.
Nos
ha sorprendido también la indumentaria de las mujeres, casi ninguna de ellas
lleva la cabeza cubierta y lo único común es la falda larga y el pañuelo sobre
los hombros. Por otra parte, a la izquierda de esta imagen aparece un varón con
un peculiar sombrero (había otro en la foto anterior con el mismo tocado) y a
su lado otro con el pañuelo a la cabeza.
Podemos imaginar la plaza con estas bellísimas fachadas, el Olmo que en su día existió, y sin tráfico rodado. El progreso destruye muchas veces. La remodelación de la fachada, tiene un premio. Ironías del destino
ResponderEliminarQue tendrá que ver una cosa con otra. El progreso creo que tiene poco que ver con la conservación de las fachadas, por gran parte del casco histórico no hay y tráfico y apenas progreso y sin embargo tenemos un casco en estado lamentable por no decir en ruinas. Creo que tiene algo mas de "culpa" la inversión económica de los propietarios.
ResponderEliminarPor cierto, deberías ver una foto de la fachada justo antes de ser remodelado todo el edificio para poder calificar el premio como ironía del destino.
En fin.....