En la colegiata de Santa María de Borja, como en todas las catedrales y monasterios, existió una Sala Capitular, a la que se accedía desde el claustro. Sin embargo, el ultimo espacio en el que se ubicó fue la llamada capilla de los mártires situada detrás de la cabecera del templo, pero su emplazamiento original estaba donde actualmente se encuentra la capilla de Nuestra Señora de la Peana. Precisamente, en torno a esa ubicación Jorge Andía ha escrito el texto que reproducimos en el que plantea una sugestiva hipótesis.