Con
la celeridad que le caracteriza, el Concejal Delegado de Urbanismo, D. Leandro
José Galindo, ha puesto en marcha el dispositivo pertinente para la limpieza de
las pintadas aparecidas, tras la reciente fiesta de los quintos. La experiencia
del personal de la Brigada de Obras y Servicios ha hecho posible la
desaparición de las mismas en lugares tan significativos como la fuente de la
plaza de España o las escaleras de la Casa Consistorial.
Debido
a la porosidad del pavimento no se han logrado los mismos resultados en la
calle de Costa, donde quedarán huellas de pintura.
Ayer,
en la red, el tema de las pintadas fue motivo de numerosos comentarios, la
mayoría de los cuales se decantaban en contra de este tipo de actuaciones que
no pueden justificarse, ni por la juventud de los protagonistas ni por el hecho
de que estas prácticas se hayan llevado a cabo en otras ocasiones.
Hay
que considerar que, desde hace dos días, se viene trabajando en la limpieza y
aún serán necesarios algunos más para reparar los daños, pues aún no han
comenzado los trabajos en el Parque, donde se han pintado paredes y el
pavimento.
Estamos
de acuerdo con algunos comentarios publicados, ya que no se trata de
criminalizar un caso concreto, sino de tomar conciencia de que las pintadas son
siempre reprobables y no podemos habituarnos a convivir con ellas.
En
este sentido, resulta inadmisible que, desde hace mucho tiempo, siga figurando
en la carretera una frase insultante para una república hermana, o que nadie
tome las medidas oportunas para evitar que lo primero que encuentren los
visitantes que llegan a Borja sean unas soeces pintadas realizadas en las
tapias de un convento (por respeto a nuestros lectores hemos ocultado parcialmente su contenido), junto con alusiones a prácticas delictivas o, al menos,
poco aconsejables.
Creemos
necesario que, aprovechando la ocasión, se debe estimular a los propietarios
afectados a borrarlas, contando con la colaboración del Ayuntamiento si fuera
necesario, pues este tipo de acciones vandálicas son consecuencia de un clima
de inseguridad que permite llevarlas a cabo.
Aunque
las hay en diferentes lugares, se podría iniciar en los puntos más concurridos
como el entorno del parque y el de la colegiata, así como en las calles Mayor y
Concepción.
En el caso de querer eliminar pintadas para mejorar como bien dices "la primera impresión de aquel que visite Borja" seria interesante y prioritario eliminar aquellas que se encuentran situadas en la esquina del Schlecker. Llevan ya unos años y su contenido racista y de ultraderecha no da muy buena impresión.
ResponderEliminarUn Saludo.