jueves, 29 de septiembre de 2011

De cables y otros asuntos



            La anterior municipal de Borja aprobó en 2010 una “Ordenanza municipal de convivencia y civismo” que reúne una serie de normas de gran interés, algunas de las cuales afectan al Patrimonio Cultural, como la realización de pintadas o la contenida en su artículo 32, por la que se prohíbe instalar aparatos de aire acondicionado que queden a la vista en las fachadas de los edificios, para evitar la agresión al paisaje urbano. Es cierto que, dicha disposición, venía sorprendentemente matizada por su referencia a “edificios de nueva construcción”. Posiblemente, ello justifica que en una de las ventanas de la fachada posterior de la propia Casa Consistorial, un edificio del siglo XVI que goza de especial protección en el Plan General de Ordenación Urbana, aparezca el aparato que puede apreciarse en la fotografía.



            Por otra parte, desde hace algunos años, se ha puesto especial empeño en eliminar o reducir los tendidos eléctricos que afean las calles de nuestro casco urbano, aunque los resultados distan mucho de ser los adecuados como puede apreciarse al comprobar que, en ese mismo edificio, hay horribles acometidas en cada una de sus tres fachadas.




            Esperamos que la nueva corporación, tan interesada en temas del Patrimonio, encuentre las soluciones adecuadas para lo que hemos señalado e, incluso, para la limpieza de las cristaleras de la arquería superior de su sede, sin tener que recurrir a volver a crear la antigua figura de “veedor de policía urbana” que no era el funcionario encargado de la seguridad de nuestras calles, sino de que las mismas presentaran el adecuado estado de limpieza y ornato, del que tan necesitados nos encontramos en nuestros días.

No hay comentarios:

Publicar un comentario