La fuente de Fuendejalón

            En ocasiones anteriores hemos publicado imágenes de fuentes y lavaderos de distintos municipios de la comarca. Sin embargo, no lo habíamos hecho de la fuente de Fuendejalón, restaurada hace algunos años y ubicada en uno de esos espacios públicos que, por su amplitud, diferencian a esta localidad de otras de su entorno.

            En el último número de la revista La Gavilla se incluye un artículo dedicado a esta fuente, de origen muy antiguo, cuya agua procedía de una gruta situada bajo la roca donde se levanta la actual ermita de la Virgen del Castillo que se construyó sobre los restos del antiguo castillo de Fuendejalón.      En su origen tenía nueve caños y el agua sobrante alimentaba el abrevadero contiguo y el lavadero. Su caudal era abundante, aunque se secó entre 1667 y 1727.

            En la clave del arco aparece grabado “1879” que, probablemente, corresponde al año en que fue remozada por canteros vasco-navarros, como se indica en el citado artículo, aunque allí se afirma que fue en 1870. Cuando se instaló la red de suministro de aguas en el municipio, la fuente desapareció al perder su utilidad. 

            Afortunadamente, hacia 1999 volvieron a recuperarla y, en la actualidad, presenta este hermoso aspecto con las amplias escalinatas de acceso. Se atendió así a los deseos de los habitantes del municipio para los que constituía una de sus señas de identidad. De hecho, la fuente estaba presente en las coplas de algunos de sus más famosos joteros. Joaquín Rodríguez, uno de los más famosos, había cantado:

            En Fuendejalón la fuente

            mana siempre agua bendita

            porque brota de la roca

            que sostiene nuestra ermita.

            Y Arancha Laborda había compuesto otra con una clara alusión al deseo de recuperarla:

            Bajo el suelo de mi pueblo

            hubo en tiempos una fuente.

            Su reconstrucción sería

            la alegría de sus gentes.