El enterramiento del II marqués de González de Castejón y de su hija

 

         En diversas ocasiones nos hemos referido a un bonito panteón que se encuentra a la entrada del cementerio de Borja, rematado por la figura de un ángel y recientemente restaurado. Fue mandado construir por el general D. Ricardo Álvarez de Espejo y González de Castejón, III marqués de González de Castejón, hijo de la II marquesa, Dª Teresa González de Castejón y Arnedo, con la que quiso reposar en ese lugar.

 

         Hace pocos días hicimos referencia al matrimonio Teresa González de Castejón con el borjano D. José Vicente Álvarez de Espejo y Navarro de Eguí, y a sus dos hijos: Fernandina y Ricardo (el general).

         De Fernandina sabíamos que había contraído matrimonio con D. Eduardo Repiso Iribarren, tras recibir la pertinente licencia en 1887. El esposo era militar, del Arma de Caballería y se retiró en 1909 con el empleo de Coronel. Está enterrado en el Cementerio Sacramental de San Lorenzo y San José, del barrio madrileño de Carabanchel (central, nicho 733, fila 4), pero nada sabíamos de Fernandina, ni de su padre, del que siempre nos llamó poderosamente la atención que no estuviera enterrado en Borja.

 

         Por una feliz circunstancia ayer se puso en contacto con nosotros Dª. Patricia Álvarez, de la Asociación “Círculo de la Libertad” de Teruel, informándonos que están catalogando y estudiando los cementerios de esa provincia.

         Conocía nuestro blog y los artículos que hemos publicado sobre los marqueses de González de Castejón. Por ello, ha tenido la amabilidad de remitirnos esta imagen del nicho donde reposan los restos de Dª. Fernandina Álvarez de Espejo y González Castejón, fallecida en Teruel el 8 de febrero de 1949, a los 91 años de edad.

         Pero, además, nos ha enviado el registro de la defunción de su padre D. José Vicente Álvarez de Espejo y Navarro, “natural de Borja”, fallecido el 15 de septiembre de 1890, a las dos de la madrugada, “a consecuencia de un catarro intestinal”. La partida la firma D. Pedro Marqués, ecónomo de la parroquia de Santa María de Teruel, indicando que había recibido los Santos Sacramentos y la Extremaunción, pero que no había otorgado testamento. El funeral tuvo lugar en la iglesia del Salvador y fue enterrado en el cementerio del Calvario.

         Nos dice Dª. Patricia que no han podido localizar el lugar donde está enterrado nuestro ilustre paisano, entre otras razones porque el cementerio sufrió enormes daños, como consecuencia de los combates que los tuvieron como escenario en el transcurso de la Guerra Civil. Sin embargo, los datos que nos ha facilitado y que le hemos agradecido de manera especial, nos han permitido resolver el enigma del destino final del marqués consorte de González de Castejón, aunque queda por conocer las razones por las que fijó su residencia en Teruel, donde se reunió con su hija, la cual le sobrevivió más de cincuenta años.