Esta mañana, en el histórico belén del convento de Santa Clara, el Niño Jesús ha recibido sentado a los Reyes Magos, tras su triunfal recorrido por nuestras calles y una noche en la que han vuelto a llevar la ilusión a muchos niños, aún no colmada tras el paso de Papá Noel y, en algunos casos, después de golpear a la tronca.
Como saben
nuestros lectores, por comentarios anteriores, este belén, el más antiguo de Borja,
comienza con las profecías que anunciaban el Nacimiento del Mesías en el lugar,
que, a partir de la Nochebuena, ocupará el Niño recién nacido que, el 6 de enero
lo vemos ya algo crecidito.
En este belén,
destaca la riqueza de las vestiduras que llevan la Virgen y San José,
elaboradas con bonitos tejidos, que han sido objeto de un estudio específico y
que, a lo largo del año, pueden verse en una de las salas del Museo de Santa
Clara.
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