Durante el reciente Foro de Asociaciones de Hispania Nostra, en Tarragona, tuvimos la oportunidad de visitar la “Casa de la Festa”, un equipamiento cultural del Ayuntamiento de la ciudad, instalado en un antiguo edificio industrial, en el que se conservan y exponen los elementos patrimoniales del Séquito Popular de las Fiestas de Santa Tecla, declaradas tanto de interés turístico nacional.
Allí pudimos ver
los diferentes tipos de gigantes: los viejos, los gigantes moros y los
negritos, de menor tamaño.
También, los “nanos”
o enanos que constituyen un espectacular conjunto de trece cabezudos, que
representan al Capitán, los Arlequines, los Negros, los Andaluces, los
Agricultores, el Médico y su esposa y los Nobles, que datan de 1865 y fueron
realizados por el escultor Bernat Verderol, aunque los actuales fueron
reproducidos en fibra de vidrio, en 2002, por el escultor Manuel Caserres.
En el centro
del recinto se exhiben una serie de figuras características de ese gran desfile
que tiene lugar con ocasión de las fiestas de Santa Tecla, patrona de Tarragona.
Entre ellos, un grifo, un león, una mula de gran tamaño, y el dragón de San
Roque que, como el toro, arroja fuego.
Todo el
conjunto tiene un gran valor simbólico para la ciudad, en donde, como en el
resto de Cataluña, forman parte de su Patrimonio Cultural Inmaterial, al igual
que los castellers o torres humanas.
La Casa de la
Festa entró en funcionamiento, en 2007, como espacio de conservación de la
imaginería festiva, ensayos y residencia de entidades y desde mayo de 2008 es
un espacio visitable con un proyecto expositivo permanente, con tres salas y un
audiovisual.
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