Recuperando una antigua
tradición, el M. I. Ayuntamiento de Borja colocó ayer la imagen de San Pedro en
la hornacina que existe en la cuesta que popularmente es conocida con el nombre
de “Costera de San Pedro”, aunque oficialmente se llama “Calle de Mateo Sánchez”.
Era el antiguo acceso a la judería, situada en el interior del Cinto y, en
época medieval, recibía la denominación de “basenta” o “basenda” que, en
definitiva, equivale a “cuesta”.
Ello
ha sido posible gracias a la colaboración de Dª Aurora Tejero que conservaba la
imagen que los vecinos colocaban allí, cada 29 de junio. También encendían una
hoguera, en el marco de una celebración popular que, aunque circunscrita a esa
zona urbana, tenía eco en toda la ciudad.
A
pesar de su interés por el que, hasta hace unos años, era escogida como motivo
para las postales que se editaban de Borja, su entorno está bastante degradado,
como sucede con otras zonas del casco antiguo. A ello contribuye esa plaga de
las pintadas, como puede apreciarse en esta imagen. La reiteración de estos
hechos vandálicos harían aconsejable adoptar medidas, tanto para retirarlas
como para prevenir el que se lleven a cabo con tanta impunidad.
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