Ayer
estuvimos visitando las obras de rehabilitación, que por iniciativa de D.
Manuel Giménez Aperte, se están llevando a cabo en el antiguo palacio de los
abades de Veruela en Bulbuente, uno de los monumentos más emblemáticos de
nuestra comarca.
En estos momentos, ya ha sido consolidado todo el
edificio y restaurados fachadas, cubiertas y forjados. Pero también se ha hecho
lo mismo con la antigua Casa Parroquial, adosada al palacio y que fue adquirida
por D. Manuel Giménez.
Se trabaja
ya en el interior donde, entre otras cosas, se han abierto los vanos del patio
interior y restaurado algunas de las puertas con arcos conopiales cuya
existencia se desconocía y han aparecido embutidas en el transcurso de las
obras.
Se ha limpiado, de las numerosas capas de cal, que
la recubrían la bóveda de la antigua capilla y consolidadas las pinturas
murales de otra anterior que también han sido descubiertas parcialmente, a la
espera de su definitiva restauración.
Que,
sin ningún tipo de ayuda puede acometerse una obra de estas características
puede ser calificado de auténtica gesta, pero mucho más lo es que pueda
realizarse con un reducidisimo número de personas.
Es
cierto que, al frente de los trabajos está un hombre excepcional cuyos amplios
saberes lo hacen heredero de una tradición que arranca en aquellos maestros que
fueron capaces de levantar las grandes catedrales medievales. No es de extrañar,
por lo tanto, que el novelista Luis Zueco, diera su nombre, Timoteo, a uno de
los personajes centrales de una de las obras de su trilogía.
Al
grupo se ha incorporado recientemente un arquitecto llegado de allende los
mares, con el propósito de realizar un estudio del monumento y levantar la
planimetría en 3D del mismo. Con todos ellos compartimos una agradable mañana y
pudimos volver a realizar una comida caliente, tras muchos días de alimentarnos
frugalmente. Lo que no pudimos escuchar fueron las jotas que cantaba Timoteo,
dado que, desde que se ha convertido en un depurado intérprete, ya solo se
actúa en los grandes escenarios del mundo.
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