domingo, 2 de julio de 2017

Efemérides del 2 de julio



         El 2 de julio de 1549 el comendador D. Pedro de Monserrat hizo entrega al Justicia y Jurados de Ambel de un conjunto de reliquias, hoy Patronas de la villa, entre las que destaca un fragmento del Lignum Crucis, procedente del conservado en Caspe.

         Para conservarlas hizo construir una capilla, dedicada al Santo Cristo, sobre cuya entrada se encuentran sus armas.




El 2 de julio de 1600 falleció combatiendo contra los holandeses el capitán borjano D.  Francisco del Arco Torralba. Era miembro de una ilustre familia establecida en Borja desde los tiempos de la Reconquista. Aquí nació hacia 1568, siendo hijo de D. Antón del Arco y Funes que, en 1555, había contraído matrimonio con Dª. Francisca Torralba. Decidió seguir la carrera militar como su hermano mayor y en 1587, cuando tenía 19 años, se alistó en la compañía del capitán Gabriel de Orti que había llegado a Borja para reclutar soldados con destino a la fuerza expedicionaria que, desde Flandes, iba a intentar la conquista de Inglaterra. Embarcó en Tarragona desde donde llegaron a Italia para, por el camino español, llegar a Flandes. La primera acción importante en la que participó fue el célebre socorro de París, en apoyo a las fuerzas de la Liga Católica. Estuvo después en la toma de varias plazas francesas, destacando por su bravura. Por eso, cuando el capitán D. Gabriel Orti regresó a España, pasó como Sargento a la compañía de D. Hernán Tello de Portocarrero, que había sido nombrado gobernador de la plaza de Douellens, y fue allí donde concibió la hazaña que el inmortalizó en 1596.



Cerca del lugar donde estaba de guarnición la compañía se encontraba la plaza de Amiens, en poder de Enrique IV, en la que se estaban concentrando un elevado número de soldados para hacer frente a los españoles. Francisco del Arco marchó con otros doce compañeros hacia esa ciudad, todos ellos disfrazados de labradores y llevando consigo un carro cargado de nueces, simulando que iban a venderlas al mercado. Al llegar a las puertas de la muralla las encontraron cerradas, pero sin inmutarse esperaron a que las abrieran y, en ese momento, atacaron a la guardia mientras dejaban el carro inmovilizado bajo los rastrillos. Salieron entonces las fuerzas españolas que habían permanecido ocultas en las proximidades y, con enorme arrojo, penetraron por la puerta bloqueada logrando hacerse con el control de la ciudad. La hazaña tuvo una enorme repercusión y el archiduque Alberto, Gobernador de los Países Bajos lo ascendió a Capitán. También se difundieron romances exaltando la gesta en la que se asociaba el nombre del intrépido soldado con el de la ciudad que le vio nacer:

Un sargento aragonés,
dicho Francisco del Arco
que es de la ciudad de Borja,
descendiente de hijosdalgo…


Al ser nombrado gobernador de Amiens D. Hernán Tello, quedó a su lado Francisco del Arco, teniendo que hacer frente al ataque inmediato de las fuerzas francesas que sitiaron la ciudad, con el propósito de recuperarla. La presión fue enorme y allí cayo frente al fuego enemigo el gobernador, por lo que tuvo que hacerse cargo de la defensa el capitán del Arco, el cual resistió cuatro meses, protagonizando atrevidas salidas y contraataques, en uno de los cuales tan sólo sobrevivieron 19 soldados de su compañía. A pesar de ello se negó a rendirse, hasta que recibió la orden de capitular por la imposibilidad de recibir socorros. Se le permitió salir de la plaza con banderas desplegadas y al son de las cajas y pífanos. Le esperaba el rey de Francia que quiso conocer personalmente al héroe borjano. Eran tiempos en los que la dureza de los combates podía compatibilizarse con singulares muestras de cortesía. Así se explica que el propio monarca francés, añadiera al arco y la saeta de las armas de nuestro capitán, una nueces que recordaran su hazaña y le hiciera entrega de una gruesa cadena de oro que Francisco del Arco sólo aceptó a cambio de donar su caballo al rey, para que no pudiera ser interpretado ese gesto como pago, sino como intercambio de regalos entre iguales. Quiso volver a España, pero no se lo permitieron, aceptando resignado continuar en Flandes, donde contrajo matrimonio con Dª. Juana Romero, hija de un capitán de gran fortuna que le había sido presentada por los propios archiduques. Poco pudo disfrutar de su nuevo estado ya que a los dos meses el conde Mauricio de Nassau marchó sobre Ostende. El 2 de julio de 1600 las fuerzas españolas se enfrentaron a las holandesas. En aquella jornada murieron tres Maestres de Campo y más de 40 capitanes, entre ellos D. Francisco del Arco que contaba 33 años de edad. Dejó un recuerdo imborrable en todos los que le conocieron, aunque en su ciudad natal, su figura nunca ha sido suficientemente exaltada.


         El 2 de julio de 1643 la ciudad de Borja votó como única Patrona de la misma a la Exaltación de la Santa Cruz. Respondía esta decisión a la bula del Papa Urbano VIII, en la que ordenaba suprimir el elevado número de fiestas que en cada localidad se celebraban, reduciéndolas a una por cada reino y otra por cada ciudad. En la actualidad sigue siendo copatrona de la misma con la Virgen de la Peana, Patrona desde el siglo XX. No obstante la referencia a ese patronazgo aparece en la representación de la Santa Cruz que remata el retablo mayor de la colegiata de Santa María.



El 2 de julio de 1869 nació en Borja D. Mariano Tejero Manero, en el seno de una humilde familia de labradores. Era hijo de José Tejero y de María del Rosario Manero. Fue enviado a estudiar el Bachillerato en Zaragoza, en cuya universidad se graduó posteriormente como Licenciado en Derecho. A los 19 años participó en la fundación del primer periódico que se editó en Borja, El Trabajo, del que aparecieron varios números bajo su dirección. También intervino en numerosas veladas teatrales que aquí se organizaban. Al terminar la carrera ejerció como abogado criminalista en Bilbao, donde sus ideales republicanos le llevaron, al mismo tiempo, a desarrollar una intensa actividad política que le condujo a ser elegido concejal de esa localidad, dentro de la candidatura del Partido Republicano, en 1914. El salto a la política nacional se produjo, en 1918, al ser elegido Diputado a Cortes por la circunscripción de Zaragoza-Borja, siendo reelegido en 1919, 1920 y 1923. El 23 de enero de 1921, le fue tributado un homenaje popular en la Fonda del Comercio de Borja, en el que tomaron parte todos los sectores sociales de la ciudad. Fue también miembro del Consejo de Administración del Ferrocarril de Cortes a Borja. En 1930 se integró en Acción Republicana de Manuel Azaña, junto con Honorato de Castro, otro destacado político borjano que le sustituyó como Diputado en la circunscripción Zaragoza-Borja en las Cortes Constituyentes de 1931. Ese año fue nombrado Director General de la Deuda y Clases Pasivas, cesando tras el cambio de gobierno. En 1934 pasó a formar parte de Izquierda Republicana, siendo nombrado Presidente del Consejo Provincial de Zaragoza. Volvió a presentarse a las elecciones de febrero de 1936 por el Frente Popular, siendo elegido por nuestra circunscripción como Diputado de unas Cortes en las que también estuvieron presentes otros dos borjanos: Honorato de Castro, por el Frente Popular; y Dionisio Pérez Viana por la CEDA. En enero de 1939, cuando la Guerra Civil se acercaba a su fin, marchó a Francia, estableciéndose en Normandía, de donde tuvo que huir al comienzo de la II Guerra Mundial. Enfermo y en circunstancias muy penosas, pues no podía andar y era transportado en una carretilla, se dirigió hacia el Sur, deteniéndose en Pesac, cerca de Burdeos, donde agotado falleció el 5 de julio de 1941.



El 2 de julio de 1931 nació en Calcena D. Jaime Luis Ainaga Blasco. Cursó los estudios eclesiásticos en el seminario de Tarazona, siendo ordenado sacerdote el 20 de enero de 1957, celebrando su primera Misa en la iglesia parroquial de Nuestra Señora de los Reyes de Calcena tres días después. Su primer destino fue el de coadjutor de Morata de Jalón, donde estuvo seis meses, antes de ser enviado como ecónomo a la parroquia de Aranda de Moncayo y encargado a la de Pomer. En 1961 fue nombrado ecónomo de las parroquias de Acered, Castejón de Alarba y Atea, al frente de las cuales estuvo hasta 1969 en que fue nombrado coadjutor de Ariza y párroco de Cabolafuente, Bordalba y Granja de San Pedro.



Llegó a Borja en 1975, como capellán del convento de Santa Clara, donde permaneció todo el resto de su vida, aunque durante ese tiempo se hizo cargo de la atención espiritual de muchas localidades de la comarca, durante periodos de tiempo más o menos dilatados: Maleján, Bulbuente, Magallón, Alberite de San Juan, Talamantes, Ambel, Ainzón, Tabuenca. También atendió al Santuario de Misericordia, la Residencia de Pensionistas de la Seguridad Social y el hospital Sancti Spiritus. Falleció en Borja el 12 de febrero de 2015.

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