En 1998, Manuel Gracia Rivas que, en aquellos momentos, desempeñaba el cargo de Secretario del Centro de Estudios Borjanos creo una nueva colección de libros dedicada a difundir el Patrimonio Artístico Religioso de los 24 municipios que constituyen el área de trabajo del Centro. Para ello contó con la colaboración de dos jóvenes investigadores, especialistas en Historia del Arte, que durante varios años fueron capaces de realizar los inventarios correspondientes a las localidades de Alberite de San Juan, Albeta, Fuendejalón, Gallur, Magallón, Mallén, Novillas y Pozuelo de Aragón. En total, nueve volúmenes ya que a Magallón dedicaron dos. Fue un generoso esfuerzo el llevado a cabo por ambos, con la colaboración del Prof. Pano para el caso de Magallón y de Manuel Gracia Rivas para Albeta. Ello merece un público reconocimiento pues la colección se puso en marcha gracias a su esfuerzo e, incluso, el diseño de la misma fue realizado por José Carlos Sancho.
Sin embargo, desde 2004 la colección había quedado ininterrumpida, debido a las dificultades que entraña encontrar a las personas adecuadas para proseguir estos trabajos. Afortunadamente, la incorporación a las tareas del Centro de Alberto Aguilera Hernández ha hecho posible el milagro y su extraordinaria capacidad de trabajo le ha permitido compaginar su esfuerzo investigador en otros ámbitos con la responsabilidad que entraña asumir este nuevo cometido. Como consecuencia de ello, a finales de diciembre se pudo disponer del volumen 10 de la colección que está dedicado a la localidad de Purujosa. En su elaboración ha participado activamente Ramiro Adiego Sevilla que tiene una especial relación con esa localidad hasta el punto de haberse convertido en un purjosano más.
La novedad más importante la constituye el hecho de que el nuevo libro ha sido editado a todo color, lo que representa una mejora sustancial tratándose de una obra dedicada al Patrimonio. En sus 160 páginas estudian detalladamente todas las obras de Arte que han logrado sobrevivir a los avatares de un municipio que estuvo a punto de desaparecer. Pertenecen a la iglesia parroquial de El Salvador y a la ermita de la Virgen de Constantín, situada en un bellísimo paraje que merece ser visitado, al igual que otros de esa zona que, en la actualidad, pertenece a la comarca del Aranda y suele ser denominada como “la cara oculta del Moncayo”.
La aparición del libro constituye, por lo tanto, un motivo de especial satisfacción que se acrecienta al conocer que, en estos momentos, ambos autores, están trabajando ya en la preparación del libro dedicado a Bulbuente, lo que nos hace concebir la esperanza que, en un futuro no muy lejano, el Centro de Estudios Borjanos pueda dar cumplimiento a uno de sus principales objetivos, en el ámbito del Patrimonio Cultural.
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