El 31 de diciembre de 1805 nació en Híjar el P. Vicente Salas que profesó como dominico en el convento de San Pedro Mártir de Borja el 16 de febrero de 1825, siendo uno de los últimos religiosos del mismo.
Tras la Desamortización
pasó a depender de la provincia del Rosario que era la encargada de formar
misioneros para Filipinas. Ordenado sacerdote marchó hacia aquellas lejanas
tierras, a bordo de la fragata mercante Sabina, formando parte de la
expedición nº 69 que partió de Cádiz en septiembre de 1841 y llegó a Manila en
febrero del año siguiente.
Inicialmente
fue destinado a Balanga, en Bataán, aunque muy pronto pasó a la provincia de
Pangasinan, como vicario de Tayud y luego de San Nicolás. Tuvo problemas en
este lugar, hasta el punto de pedir ser repatriado a España pero, aunque su
solicitud fue aceptada, no llegó a embarcar, pues se le dio el cargo de
bibliotecario en el convento de Santo Domingo de Manila, del que llegó a ser
Superior.
El 19 de febrero de 1857
salió para la península acompañando a otros religiosos enfermos. Una vez aquí
fue destinado al convento de Valencia en el que vivió varios años. Era un
excelente predicador y se distinguió en un ministerio especialmente difícil, el
de la atención espiritual a los condenados a muerte. No hemos encontrado el
lugar y la fecha de su fallecimiento.
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