Recordando a un gran sacerdote y músico nacido en Fuendejalón

            El 19 de octubre de 1913 nació en Fuendejalón Pedro León Andía Labarta. Era el octavo de los diez hijos que tuvo el matrimonio formado por León Andía Cuartero y Francisca Labarta Oliván.

Valdeltormo en una antigua fotografía de Mosen León Andía

Mas de Labrador, fotografíado por Mosen León cuando ya había sido abandonado

            Tras cursar los estudios eclesiásticos en Belchite y Zaragoza, fue ordenado sacerdote el 17 de febrero de 1940, siendo enviado, poco después, como cura ecónomo a las parroquias de Valdeltormo y Mas de Labrador, en la comarca del Matarraña, que se encontraban vacantes por haber asesinados sus titulares durante la guerra civil.

            Mosen León, como siempre fue conocido, desempeñó su ministerio pastoral allí durante 56 años, renunciando a destinos más importantes, ya que era un gran músico que, antes de su ordenación había sido organista en el seminario de San Carlos y la basílica del Pilar.

            Supo transmitir a sus feligreses su amor por la Música, llegando a formar varias bandas y coros que dirigía personalmente y con los que recorrió diversos lugares.

            Fue un hombre muy querido. Una de las calles de Valdeltormo lleva su nombre y, en 2010, se instaló en una pequeña plaza, el busto en mármol que le había realizado el escultor José Manuel Aragonés.

            No fueron los únicos homenajes que se le tributaron. También se colocó un mural de cerámica en la Casa de Cultura donde se organizó una exposición con diversos recuerdos de su vida y muchas de las fotografías que realizó, pues ésta fue otra de sus grandes aficiones.

            Los últimos años de su vida transcurrieron en la Residencia de Ancianos “Santo Ángel” de Alcañiz, donde falleció el 17 de marzo de 2011.

            En Valdeltormo se celebró un emotivo funeral, al término del cual, algunos de sus músicos encabezaron la comitiva que se trasladó hasta el lugar donde se encuentra el monumento citado, donde se efectuó una ofrenda floral, sonando las notas del himno de la localidad que él compuso en 1992.

            Ha sido uno de sus sobrinos, residente en Fuendejalón, quien nos ha dado a conocer la figura de este hombre entrañable que había pasado desapercibido para nosotros, hasta el punto de que no aparece en el Diccionario Biógráfico editado por el Centro de Estudios Borjanos, aunque será incluido cuando sea publicado un nuevo volumen.