En
el refectorio del antiguo convento franciscano de Priego de Córdoba se
conservan, debidamente enmarcados, las representaciones gráficas de los sellos
utilizados en muchos conventos de la orden. Por ello, hemos creído conveniente
dar a conocer el correspondiente al convento de San Francisco de Borja que, en
algún momento, ha sido objeto de una interpretación equivocada.
Ya
lo dimos a conocer con motivo de la publicación de la obra de Emilio Jiménez, El
Libro Cabreo del convento de San Francisco de la ciudad de Borja (1636-1767),
en cuya portada se reproducía su imagen, a partir de la fotografía que nos
facilitó D. José María Sancho Martínez.
Ahora,
disponemos de esta otra, aún más precisa, que nos permite precisar su diseño.
En el mismo aparece San Francisco, arrodillado en oración, con un crucifijo en
su mano derecha, mientras que en la izquierda sostiene el libro de la regla.
Viste el hábito, ceñido por el cordón, y puede verse uno de sus pies descalzo,
mientras que la cabeza está nimbada por el halo de santidad. La figura está
flanqueada por elementos vegetales. En la parte inferior está representado el
escudo primitivo de Borja que tiene como única pieza a un castillo con tres
torres, sin la vaca ni, por supuesto, el león y la flor de lis que le concedió
Felipe V. A ambos lados del escudo se advierten también representaciones
vegetales, que en los sellos bien impresos no ofrecen ninguna duda sin que
puedan ser confundidas con la flor de lis y el león que algunos quisieron ver
en una ubicación imposible. En la orla se lee la leyenda: “SIGI * CONVENTVS * S
* F * BVRGIE” que traducido vendría a decir “Sello del convento de San
Francisco de Borja”.
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