Nuevos descubrimientos en la iglesia parroquial de Mallén

            En el último número de nuestra revista Cuadernos de Estudios Borjanos publicamos un interesante artículo de los arqueólogos D. Francisco Javier Ruiz Ruiz y D. José Luis Cebolla Berlanga, responsables de las excavaciones efectuadas en la iglesia parroquial de Nuestra Señora de los Ángeles de Mallén, en el que daban cuenta de los hallazgos efectuados, entre los que destacaba la pervivencia de importantes restos de la antigua iglesia románica, englobados en la actual fábrica del templo.

            Desde antiguo era conocido que parte del ábside románico se había conservado. Una parte del mismo sobresalía sobre las construcciones de la parte posterior de la iglesia y, en el Centro, conservábamos imágenes de lo que sin duda era la parte superior del vano central del mismo. Incluso, en la propia parroquia, existía un dibujo en el que un artista contemporáneo había reflejado este detalle.

            Fue, durante las obras de restauración llevadas a cabo de 1985 cuando se descubrió la parte posterior del ábside, como aparece reflejado en la obra que sobre el Patrimonio Artístico de Mallén publicaron José Carlos Sancho Bas y Pedro Luis Hernando Sebastián en 2002.

            En el artículo antes citado se incluía la fotografía que figura arriba, correspondiente a los restos encontrados entonces que permanecieron visibles en el interior de la iglesia, al término de los trabajos.

            En noviembre del pasado año, el Gobierno de Aragón, el Obispado de Tarazona y el Ayuntamiento de Mallén suscribieron un convenio para la restauración del ábside. El presupuesto para esta actuación era de 128.824 euros. El gobierno aragonés aportaba el 58,29 %, corriendo a cargo del obispado y del ayuntamiento, el 41 % restante a partes iguales.

            Ahora, al acometer los trabajos, bajo la dirección del arquitecto D. Fernando Alegre, ha tenido lugar un importante descubrimiento ya que, por el interior del ábside y ambos lados del actual retablo mayor, han aparecido dos bellísimos ventanales que, incluso conservan las placas de alabastro que los cerraban.

            Todos estos hallazgos vienen a reafirmar el interés de este templo parroquial que, sin duda, es uno de los más hermosos de nuestra zona.