La
presencia de la Compañía de Jesús en el antiguo monasterio cisterciense de
Santa María la Real de Veruela tuvo una gran repercusión en nuestra zona. Así
se puso de manifiesto en la exposición itinerante, organizada por la Excma.
Diputación Provincial el pasado año, que recaló en la Casa de Aguilar en las
primeras semanas de junio, la cual completamos con una selección de recuerdos
del monasterio, conservados en nuestros archivos, dado el interés que, desde
hace años, venimos mostrando por reunir todo aquello relacionado con el mismo.
En
este sentido, acabamos de adquirir dos pequeñas obras que vienen a poner de
manifiesto una faceta frecuentemente olvidada de la labor realizada por los
jesuitas. Porque, durante una etapa de su presencia en Veruela, lograron
convertirlo en un importante centro de irradiación de la cultura clásica.
Una
de ellas es la primera edición de las fábulas de Fedro, llevada a cabo por el
P. José Llobera S. I. dentro de la “Biblioteca Literaria Escolar”, destinada a
“las aulas de los diversos países de habla castellana que fue publicada en
1924. Según manifestaba en el prólogo, una de las motivaciones que habían
impulsado la edición de estas obras clásicas era el sentimiento de que una
nación como la nuestra “no atesore en su tanto el caudal lingüístico de que
hacen gala las cultas naciones de Europa”. Este fue el primero de los volúmenes
publicados a los que siguieron otros, que nos gustaría conseguir, en cuya
preparación tuvieron una decidida participación el citado P. Llobera y otro
eximio jesuita, el P. Arturo María Cayuela S. J.
La
otra obra es el volumen I de Selecta Latina, una antología de textos latinos
“preparada por profesores del Colegio de Ntra. Sra. de Veruela”, destinada a
los estudiantes de “1º y 2º curso y Examen de Estado”, que fue editada en 1949.
El hecho de que el ejemplar adquirido corresponda a la décima edición constituye
una clara expresión de la acogida que, en su momento, tuvo esta iniciativa.
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