Nuestro artículo sobre supervivientes y fallecido en las
campañas de Cuba y Filipinas ha despertado gran interés y, en relación con el
mismo, hemos recibido información sobre dos casos llamativos.
Uno de ellos es el de D. Esteban Martínez Pérez, natural de
Ambel, (el que está sentado a la izquierda, antes de partir para la isla, del
que la familia recibió información sobre su fallecimiento cuando el barco en el
que regresaba se hundió en aguas del
Atlántico, por lo que decidieron realizar un funeral en la iglesia parroquial
de esa localidad con un féretro vacío.
Su alegría fue enorme cuando, algún tiempo después, el
supuesto fallecido apareció en casa. De este extraordinario caso informó la
prensa, dando cuenta de que, en el último momento, había cambiado el pasaje con
un compañero, sin notificarlo a las autoridades, lo que provocó la confusión y
su inclusión entre la relación de muertos.
D. Óscar Montorio Sanjuán, sobrino nieto suyo, que nos ha
facilitado la información, no ha remitido también algunos recuerdos que conserva
la familia, como las fotografías que incluimos, un billete del Banco Español de
La Habana y la etiqueta del baúl, fabricada en aquellas ciudad, en el que trajo
sus pertenencias el que, desde ese momento, fue conocido como el “tío ahogao”.
Por otra parte, Dª. Laura Ruberte, de Magallón, nos ha
remitido esta antigua fotografía de su bisabuelo D. Cristóbal Ruberte, también
combatiente en Cuba y superviviente de la campaña que falleció en Badalona a la
edad de 100 años, algo también sorprendente para quien había sufrido tanto en
aquellas lejanas tierras y a quien los medios de comunicación dedicaron varios
reportajes, con ocasión de su centenario. También apareció un artículo en el
programa de las fiestas de Magallón.
No hay comentarios:
Publicar un comentario