Los visitantes a los que acompañamos en su recorrido por Albeta, tenían especial interés en conocer lo que actualmente se denomina “Molino de la Hiedra”, dado que se trata de un edificio histórico, vinculado a uno de los antiguos señores de la localidad.
Concretamente, pertenecía a la familia
Coloma, propietaria de la mitad de Albeta. Como es sabido, esta antigua
población de moriscos tenía un estatus muy peculiar. Por un lado, era barrio de
Borja, gozando sus habitantes de los privilegios de sus ciudadanos, pero, por
otra parte, estaba bajo dominio de dos señores, los Coloma y los condes de
Fuenclara, que se dividían la población por mitades. Sus derechos eran muy
limitados, quedando reducidos a los beneficios derivados de la explotación de
determinados servicios como el molino.
Este molino está documentado desde el
siglo XVI, al menos, cuando era propiedad de D. Pedro Pérez Coloma y es, a
comienzos del siglo XVII, cuando se le denomina como “Molino de Arenas”.
Adquirido por la actual familia
propietaria, fue restaurado cuidadosamente como vivienda privada y, posteriormente,
transformado en alojamiento rural. Enclavado en un bonito paraje, a cierta
distancia del casco urbano, ha obtenido valoraciones muy positivas.
Aunque no pudimos visitar su interior,
existen imágenes del mismo en Internet en las que se aprecia el cuidado puesto
en la recuperación de la maquinaria original, así como en la decoración de sus
instalaciones.
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