Como
es tradición en Borja el Día de San Jorge, numerosas personas acudieron a la
ermita que el Patrón de Aragón tiene dedicada en nuestra ciudad, emplazada en
un hermoso paraje desde el que se divisa una de las mejores perspectivas del
casco urbano, como ha sabido captar Enrique Lacleta con su cámara.
En el
interior del templo, el párroco D. Carmelo Roy Blasco presidió la Eucaristía,
única ocasión en la que se celebra allí en el transcurso del año. Hay que
destacar el buen estado en el que se encuentra la ermita aunque fueron
retirados, hace tiempo, los elementos más valiosos de su exorno, por motivo de
seguridad.
Posteriormente
se procedió a la bendición de los términos que en Borja se lleva a cabo ese
día. Precedido por la Cruz que se utiliza en esta ceremonia, el párroco la
realizó con agua bendita en dirección a los cuatro puntos cardinales,
utilizando para ello una rama de la zona.
Al
finalizar, se distribuyeron entre los asistentes algunos de los roscones
reunidos en la ronda celebrada en la noche anterior, mientras que otros fueron
enviados a centros benéficos.
En las
inmediaciones de la ermita tuvo lugar en la finca de D. Ricardo Pérez Manrique,
antiguo oficial Jefe de la Policía Local, la recepción que todos los años ofrece,
con la particularidad de ser, en esta ocasión, la última por razones
cronológicas.
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