Hemos conseguido esta octavilla publicitaria del Cine Cervantes en la que se anuncia la proyección de la película “Intruso en la Armada”. Era éste un procedimiento habitual para dar a conocer las películas que se “pasarían” en los próximos días. Las octavillas eran facilitadas por la distribuidora y en Borja se imprimían al dorso los datos correspondientes a las fechas y horarios de proyección.
La película era un musical británico (en blanco y negro),
dirigido por Marcel Varnell, que había sido estrenada en 1943 con el título de “Bell
Bottom George” (en alusión al pantalón acampanado de los marineros de la Royal
Navy). Producida en plena Guerra Mundial, era una película de entretenimiento
destinada a mantener la moral en aquellos difíciles momentos y, en su argumento,
no faltaban los malvados espías alemanes que querían boicotear un submarino
británica, salvado gracias a la actuación del “intruso” George que había
suplantado accidentalmente a un amigo marinero.
La película era un musical británico (en blanco y negro),
dirigido por Marcel Varnell, que había sido estrenada en 1943 con el título de “Bell
Bottom George” (en alusión al pantalón acampanado de los marineros de la Royal
Navy). Producida en plena Guerra Mundial, era una película de entretenimiento
destinada a mantener la moral en aquellos difíciles momentos y, en su argumento,
no faltaban los malvados espías alemanes que querían boicotear un submarino
británica, salvado gracias a la actuación del “intruso” George que había
suplantado accidentalmente a un amigo marinero.
Aquellas octavillas equivalían a los
carteles que ahora se fijan en los tablones de anuncios existentes en varios lugares
de la ciudad, dando noticia de las películas a proyectar en el transcurso del
mes correspondiente.
Otro sistema publicitario era el de los
cartones con fotogramas de la película correspondiente que se colocaban en
puntos estratégicos de Borja. En nuestra ciudad se conservan los de la primera
versión de la película “Nobleza Baturra”, que, junto el cartel de la misma, son
uno de los pocos testimonios conservados de aquella mítica película rodada
aquí, dado que se ha perdido. Prueba de su importancia lo constituye el hecho
de que la colección fuera mostrada en una exposición celebrada en el Palacio de
Sástago sobre los orígenes del cine en Aragón.
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