Revistas recibidas 22

            El tomo LXXI de la Revista de Estudios Extremeños que acabamos de recibir tiene carácter extraordinario y está dedicado a la Actas del X Encuentro Historiográfico del Grupo de Estudios sobre la Historia Contemporánea de Extremadura, dedicado al tema “Extremadura durante la II República (1931-1936)”.  Son 652 páginas en las que se dan a conocer tanto las ponencias como las comunicaciones presentadas en esa reunión que se celebró, en Cáceres, los días 14 y 15 de noviembre de 2014.

            En el último número de la revista La Magia de viajar por Aragón, con el que se conmemoran los diez años de la misma, podemos destacar el artículo dedicado a “La Fería de la Brujería de Trasmoz”. A lo largo de 10 páginas se dan a conocer todas las circunstancias relacionadas con este acontecimiento cultural, del que publicamos aquí otro reportaje, y de otros aspectos de una localidad que es calificada como “villa fascinante”.

            El volumen 45-1 de Mélanges de la Casa de Velázquez de Madrid está dedicado, con carácter monográfico a las lenguas indígenas e imperio en la América del Sur colonial, en el que se analiza el complejo mundo de los idiomas que se hablaban en esa zona antes de la llegada de españoles y portugueses, a través de una serie de importantes artículos, fruto del trabajo colectivo del grupo LANGAS, que fueron debatidos en una reunión celebrada en el Instituto Nacional de Lenguas y Civilizaciones Orientales de París, en octubre de 2012.

            También hemos recibido el número 129 de la Revista de Historia Naval, del Instituto de Historia y Cultura Naval, entre cuyos artículos destacamos el de Yago Abilleira Crespo sobre “La batalla de Rande (ría de Vigo, 1702), última derrota de una Flota de Indias”. Cuando recientemente atravesábamos esa ría, a la altura de Rande, recordábamos ese enfrentamiento en el que una escuadra combinada anglo-holandesa, intentó capturar a la Flota de Nueva España de 1699 que, tras tres años retenida en México, había emprendido el tornaviaje cuando el inicio de las hostilidades se consideraba inminente. Aunque su destino era Cádiz, la flota decide poner rumbo a Galicia, entrando en la ría de Vigo bajo la protección de una escuadra francesa el 21 de septiembre de 1702. Allí, el 23 de octubre son atacados por las fuerzas enemigas que, tras forzar las defensas capturan un importante número de buques, mientras que 20 barcos franceses y 11 españoles resultan hundidos. A partir de ese momento, la leyenda de un gran tesoro sepultado en las aguas de la ría cobró carta de naturaleza y provocó numerosos intentos, algunos muy recientes, por rescatarlo. Sin embargo, como viene a demostrar el autor, la mayor parte de los caudales que transportaba habían sido desembarcados con anterioridad y el resultado para los atacantes de tan audaz acción fue muy escaso, ya que su mayor captura, la Nuestra Señora de los Remedios, se hundió en las islas Cíes con su dotación de presa. La realidad de lo ocurrido queda patente por el hecho contrastado de que llegaran al alcázar de Segovia nada menos que 13,6 millones de pesos (378 toneladas de plata), la mayor cantidad de la historia pues, hasta ese momento, la cuantía más elevada había sido de algo más de dos millones. Tras hacer frente a las indemnizaciones a los franceses, las arcas reales obtuvieron cerca de nueve millones que sirvieron para financiar la Guerra de Sucesión, algo que no pudieron aceptar los ingleses para quien resultó más conveniente difundir la falsa idea de la pérdida de este fabuloso tesoro.