sábado, 28 de mayo de 2016

Interés de las fotos familiares


            A veces damos poca importancia a las antiguas fotos familiares que conservamos, a pesar de que, junto al valor sentimental que aportan, ofrecen detalles de una época y constituyen un testimonio de indudable interés.
            Entre las pertenecientes al fondo de la familia Giménez Aperte, hemos seleccionados dos. La primera es la de un soldado borjano: Dionisio Pellicer, que es de características similares a las que se hacían los que cumplían el servicio militar para remitir a sus casas. Eran, por lo tanto, fotos en serie, como lo demuestra el número que figura en la parte inferior derecha, para permitir al fotógrafo la correcta identificación de cada una de ellas.
            Está datada en 1928, cuando el citado joven, sobrino de Vicenta Pellicer, estaba destinado en el Regimiento de Infantería nº 57 “Vergara”, de guarnición en Barcelona. Por ello, apoya su mano derecha sobre esa composición del escudo de España, al pie del cual aparece el nombre del regimiento, y en cuello luce el nº 57 que, asimismo, lo identifica.
            Viste el uniforme de la época, cerrado al cuello y ceñid con cinturón del que pende la bayoneta. Calza botas reglamentarias y la parte baja de los pantalones se sujeta con vendas, a modo de polainas. Es curioso el hecho de cubrirse con boina.




            Este regimiento que tenía el mote de “El Noble”, había sido creado en 1872, como Batallón de Cazadores de La Habana y, posteriormente, pasó a ser de Cazadores de Montaña. En el momento en el que sirvió en él nuestro paisano, la unidad estaba de guarnición en Barcelona, tras permanecer en África entre 1924 y 1926, donde ya había estado entre 1921 y 1922. Lo mandaba  el Coronel D. Luis Franco Cuadras, que había sido nombrado en diciembre de 1923. En el documento que reproducimos, del año 1927, aparece autorizando el matrimonio de un soldado. Tras el advenimiento de la II República, el regimiento fue disuelto en 1931.



            En esta otra fotografía aparecen tres miembros de la familia y fue realizada con ocasión de un acontecimiento importante, como era el de la Primera Comunión del niño de la izquierda.
            Nos sirve como documento sociológico para comprobar el traje que utilizaban para la ceremonia, en el que el elemento más destacado es la banda blanca que cruza el pecho y que se conservaba como recuerdo. 



            También era frecuente la cinta, a manera de lazo, que se prendía en una de las mangas, a veces pintada con motivos alusivos, como puede verse en esta otra fotografía que no es de Borja, sino tomada de Internet. Más tarde se impondrían los trajes de marineros, al principio muy sencillos y, posteriormente, sumamente recargados, mientras que las niñas lucían trajes que recordaban a los de una radiante novia.



            Terminamos con esta otra foto de un grupo de jóvenes y niños, entre los que nuestros lectores podrán reconocer a casi todas las personas. En el Centro, con una sorprendente coincidencia en el modelo de traje, se encuentran Asunción Giménez y Margarita Zueco, mientras que quien viste traje con pajarita al cuello creemos que es Fausto Pelegrin.

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