Antigua foto de las bodegas de Borja

         D. Tomás Espeleta Sancho nos ha enviado esta fotografía, desconocida para nosotros, que viene rotulada como “Borja. Casas cueva”. Desde luego no son “casas”, sino bodegas vinarias y, en nuestra opinión, podrían corresponder a la zona de la Valturera. En cualquier caso, es una imagen muy interesante con esos dos carros detenidos frente a una de ellas, cubierto con un toldo el que está delante, como si fuera una gran tartana. Llaman la atención los postes que hay al fondo y que podrían corresponder a los del tendido telegráfico que enlazaba con Tarazona y que, en ningún caso se verían en las bodegas de Poniente. Pero, lo más importante de la fotografía es que fue realizada, entre 1917 y 1918, por Otto Wunderlich y forma parte de la colección de 45.000 imágenes de este autor que conserva la Fototeca del Patrimonio Histórico del Instituto de Patrimonio Cultural de España.

         Otto Wunderlich (1886-1975) había nacido en Stuttgart y llegó a España en 1913 para trabajar en la Sociedad Minera “El Guindo”. Su pasión por la fotografía en la que había iniciado en Londres y París le llevó a dedicarse profesionalmente a ella, a partir de 1917. Viajó por toda España, muchas veces andando, en bicicleta o en moto. Se sabe que estuvo en Aragón en cuatro ocasiones. El primer recorrido lo efectuó poco después de iniciar su actividad como fotógrafo, en el transcurso del cual estuvo en Tarazona y Vera de Moncayo. Por lo tanto, la fotografía que ha motivado este comentario la debió realizar entonces.

         Estas imágenes son de Vera de Moncayo, a través de las cuales queda patente su interés por los tipos populares, algo que atraía a todos los fotógrafos y artistas de la época. Especialmente llamativa son las que aparecen esos cuatro varones ataviados con la indumentaria tradicional.

         De Veruela hemos encontrado esta otra fotografía realizada en el interior del claustro que muestra una vegetación muy diferente a la actual. Entonces estaba ocupado por la Compañía de Jesús y a la derecha se ve el lavatorio del claustro con sus arcos tabicados, al igual que los vanos del resto del mismo, tanto en la parte inferior como superior.

         En octubre del pasado año, se expuso en las salas del Cuarto Espacio de la Diputación de Zaragoza una selección de 92 imágenes de las más de 200 que existen en su colección sobre temas aragoneses.

         Entre ellas figuraba esta preciosa vista de la colegiata del Santo Sepulcro de Calatayud en la que aparecen, en primer plano, esos artilugios dedicados a la fabricación de sogas de cáñamo, una industria artesanal de gran tradición en esa ciudad de la que salieron muchos metros de jarcia para los buques de la Armada.

         Otras fotografías que pudieron verse fueron la de este labrador de Albarracín y esta obra de unos abuelos que, con su nieta, pasean por las calles de Gistaín. Ambas fueron tomadas en su segundo viaje a Aragón, en el que recorrió Teruel, Daroca, Calatayud y los Pirineos, aunque en 1930 volvió a Albarracín y Calatayud, entre otros lugares, por lo que también podrían ser datadas en esa fecha las correspondientes a las ciudades citadas.