sábado, 24 de agosto de 2019

La evolución del Patrimonio arquitectónico de Gallur


         El monumento más destacado de Gallur es la iglesia parroquial de San Pedro Apóstol de la que se conserva esta antigua imagen en la que destaca la espectacular torre que inicialmente tuvo y que no llegamos a conocer, pues en fecha que desconocemos fue derribada.
         



         Este era el aspecto que presentaba cuando la visitamos por vez primera, en la década de los años 70 del pasado siglo. En la imagen llama la atención la torre, de mucha menor altura y rematada con un cuerpo para las campanas, cubierto con tejados a dos aguas. Pero aún es más interesante la presencia de unas construcciones próximas a la fachada que da al Ebro.



         La iglesia fue sometida a un dilatado proceso de rehabilitación que dio comienzo a finales de la década de los años 80 con el derribo de la casa parroquial que estaba adosada a los pies del templo.




         Entre 1992 y 1993 se llevó a cabo la restauración de la torre, a la que, para darle mayor altura se le añadió un cuerpo, en el que ahora está el reloj.




         Al final de esa década se comenzó a restaurar la fachada principal en la que se  eliminó un cuerpo superior, construido en los años 40, en la que había estado situada la escuela parroquial.





         Finalmente se intervino en la cabecera de la iglesia y en la fachada que da al Ebro, junto al que se creó un parque con un mirador al río, sin que podamos constatar lo ocurrido con las edificaciones allí existentes.




         Mientras tanto, había sido pintado el interior y repuestas algunas imágenes en el retablo mayor, que habíamos llegado a ver en un almacén.




         Tras todas estas intervenciones, este es el aspecto actual de la iglesia, junto a cuya fachada principal fue instalado el monumento dedicado al dance.





         Otro monumento importante es la antigua casa palacio de los Ortega, familia a la que perteneció el destacado general D. Jaime Ortega y Olleta, aunque nació en Tauste el 28 de febrero de 1817. Este era el estado inicial del edificio, muy deteriorado y con ampliaciones que desvirtuaban su aspecto original.




         Adquirido por el Ayuntamiento fue objeto de una completa rehabilitación, siendo destinado a usos culturales, entre ellos la Biblioteca Municipal, aunque Gallur dispone también de una Casa de Cultura, muy bien equipada, junto a la Casa Consistorial.



         Otro edificio en el que intervino el Ayuntamiento fue el de la antigua estación del ferrocarril de las Cinco Villas, que tras su rehabilitación, fue destinado a albergue.




         Recientemente, el Ayuntamiento decidió declarar “Monumento de Interés Local” al antiguo edificio de Dirección y Administración de la línea del ferrocarril Sádaba-Gallur, para destinarlo también a usos culturales. Se da la circunstancia de que esta decisión, en virtud de lo establecido en la vigente Ley del Patrimonio Cultural Aragonés, lleva implícita su inclusión en el Censo General, como “Bien Catalogado” en el que no tenemos constancia de que figure ningún otro monumento de Gallur.




         Dentro de las construcciones vinculadas al Canal Imperial de Aragón, que atraviesa la población, hay que destacar el puente que lo cruza y las llamadas “bodegas del canal” que, tras su rehabilitación se emplean como Sala de Exposiciones.





         También relacionados con el canal se conservan dos elementos: el soporte de una conducción de la antigua azucarera, que lo cruzaba y que se ha querido mantener, junto a la actual pasarela, como testimonio del pasado industrial. El otro es la fuente construida en 1886, con agua del canal, la cual fue reconstruida por el Ayuntamiento en 1995.



         Dentro del conjunto patrimonial debemos citar a la capilla del beato Agno, dedicada a uno de los hijos más ilustres de la población,  fray Lope Fernando de Ayn, nacido en 1190, siendo el primer aragonés que profesó como franciscano, llegando a ser nombrado por el Papa legado apostólico en el Norte de África y primer obispo de Marruecos. El templo, construido en 1956, según proyecto del arquitecto D. Regino Borobio, ha sido restaurado no hace mucho tiempo.



         Pero al abordar la evolución del patrimonio arquitectónico de Gallur, no podemos eludir una referencia a la plaza de España, cuyo aspecto actual es el que muestra esta imagen y que, en el pasado, fue uno de los conjuntos más importantes de la localidad.




         Allí se encontraba la casa palacio de los Morlanes o los Blancas, un destacado monumento al que nos hemos referido en diversas ocasiones, el cual fue demolido y, en su solar, se construyó el Cine Roma. Se da la circunstancia de que este nuevo edificio, que ha dejado de ser utilizado como cine, también tenía su interés, aunque queda muy poco de su decoración interior.




       Pero el carácter de la plaza lo conformaban una serie de edificios que han sido demolidos y reemplazados en su práctica totalidad. Como ejemplo, podemos ver la evolución del que existía junto al cine Roma.




         Lo mismo podríamos decir del situado al otro lado del cine o los del resto de la plaza que, aún pueden verse en esta fotografía no demasiado antigua.

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