Hemos
recibido el último número de la revista El
Eco del Isuela que edita la Asociación de Amigos de la villa de Calcena y
que, junto a su labor informativa, constituye un instrumento de cohesión entre
los numerosos calcenarios que residen en otras localidades.
Entre
las noticias que aporta, destacamos la nueva señalización del batán, un
precioso lugar situado en las inmediaciones en el que se conserva un bello
puente, sobre el cauce del Isuela. También han sido señalizadas las primeras
rutas de BTT, merced a una iniciativa de la Federación Aragonesa de Ciclismo,
las cuales discurren por 156 km de la comarca del Aranda.
Una
actuación importante ha sido el derribo de antiguos edificios abandonados,
efectuada con la colaboración del Gobierno de Aragón, lo cual no sólo ha
permitido eliminar un peligro, sin mejorar la imagen del casco urbano que, en
momentos del pasado, parecía haber sufrido los efectos de un bombardeo.
El
deseo de fijar la población y recuperar la demografía de un municipio que llegó
a tener más de 1.000 habitantes, ha impulsado el proyecto de construir una
residencia para mayores en régimen de cooperativa, que esperamos pueda llevarse
a cabo. De todo ello y de muchas cosas más se da cuenta en este revista que ha
alcanzado ya el nº 55.
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