Visita a Tarazona

         El Presidente del Centro, acompañando al Dr. Bernard Berthod y a Gaël Favier, se desplazó ayer a Tarazona, donde llevaron a cabo un intenso programa de visitas. Por petición de la Fundación Tarazona Monumental hemos modificado alguno de los comentarios que habíamos publicado.

         En primer lugar, cumplimentaron al Sr. Obispo, D. Vicente Rebollo Mozos, en su residencia privada. En el transcurso de un encuentro muy cordial, le invitaron a participar en el próximo congreso de Europae Thesauri que se celebrará en Burgos, a mediados de noviembre. Con la emoción del momento, se olvidaron de dejar constancia fotográfica de la visita y la que reproducimos fue tomado posteriormente en el Palacio Episcopal.

 

 

         A continuación, visitaron detenidamente la catedral, en la que no habían estado desde hace diez años y donde les sorprendió el enorme avance experimentado por las obras de restauración, así como por la calidad de las mismas.

         Quisieron visitar otros templos, en especial el de la Magdalena, cuya fiesta se celebraba ayer, pero como es habitual todos estaban cerrados. La Fundación Tarazona Monumental nos indica que organiza visitas guiadas a los mismos y, por lo tanto, pueden visitarse.

 

         Afortunadamente, pudieron conocer el Palacio Episcopal, donde les atendió admirablemente, el Vicario Episcopal, el ilustre borjano D. Javier Bernal, quien tuvo la amabilidad de acompañarles a lo largo de un detallado recorrido por dependencias que no conocíamos.

         Nos sorprendió gratamente la reconstrucción impulsada por el propio D. Javier de la antigua residencia de los obispos turiasonenses, donde ha instalado interesantes obras de arte, pero también ha cuidado con mimo, otras dependencias más humildes, lo que permite ofrecer una perfecta panorámica de cómo era la vida en ese lugar. La Fundación Tarazona Monumental nos indica que la rehabilitación de esa zona ha sido realizada por ella, aportando también muchos de las piezas expuestas.

 

         El recorrido culminó en el Salón de Trono, ese precioso espacio, escenario de muchos acontecimientos históricos, en el que destacan los retratos de todos los obispos, que causó la lógica sorpresa en nuestros acompañantes.