Siguiendo
la tradición, ayer por la tarde, la imagen de “San Juanico” volvió a presidir
el barrio de su nombre, convenientemente iluminada por medio de un sistema
cedido por un prestigioso establecimiento de nuestra ciudad.
Desaparecida
la casa en la que se encontraba la antigua hornacina, se ha levantado un pilar
que, falta de guirnaldas, estaba decorado con un llamativo conjunto de cables.
Allí, a lo largo de la tarde, se fueron congregando devotos llegados desde los
más diversos lugares, bajo la atenta mirada de D. Alfredo Sánchez que ejerció
de guardián del Santo.
Junto
al estanque de Sopez, se encontraba la hoguera que, a pesar de sus reducidas
dimensiones, exigió un amplio dispositivo de seguridad, integrado por bomberos
voluntarios, eficientemente mandados, Protección Civil y Policía Local,
desplegado también por el monte próximo, en cumplimiento de la legislación
vigente.
A las
diez y media en punto de la noche, el Sr. Alcalde D. Euduardo Arilla dio orden
de encenderla, lo que llevó a cabo, con rapidez, un miembro de la brigada
municipal.
Muy pronto, las llamas alcanzaron una
considerable altura consumiendo el escaso material apilado, lo que fue de
agradecer, dado el calor de la noche.
El
propio Alcalde, junto con el Concejal Sr. Jiménez Ferrández, ofrecieron los
aperitivos preparados a los numerosos asistentes, mientras que otros se
congregaban en torno a la mesa dispuesta al efecto, prolongándose la velada
hasta que el fuego y los aperitivos se consumieron.
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