Seguimos
ofreciendo imágenes recuperadas de hace casi un cuarto de siglo, presentadas al
I Concurso de Fotografía convocado por nuestro Centro, en las que se pueden ver
detalles de nuestra ciudad, muchos de ellos desaparecidos o modificados.
En
esta bonita fotografía de la fuente de la plaza de España se aprecian los tubos
instalados entonces, por donde anteriormente salían los caños por los que se
captaba el agua para el suministro de boca. Parecían rastrillos invertidos con
sus chorrillos a manera de púas. Detrás, uno de los árboles que había en la
plaza, cuyo diseño fue modificado completamente, años después.
Los
más jóvenes ya no han conocido los llamadores con forma de dragones alados que
había en las puertas del palacio de Nogués, en la actual calle de Costa. La
Policía sorprendió a los que intentaban robarlos y fueron retirados, sin que
conozcamos su destino final. Por su forma, llamaban la atención y fueron motivo
de inspiración para muchos fotógrafos.
Así se
veía entonces la espectacular galería o logia de la Casa de las Conchas, más
tarde oculta por las estructuras metálicas que aún se mantienen en pie y que,
dentro de poco, serán retiradas cuando se acometa la nueva fase de
rehabilitación del edificio, como consecuencia de la cual la galería recobrará
su primitivo esplendor.
Esta
es la lápida que, a mediados del pasado siglo, se colocó en la fuente de
Moncín, con la composición poética que Marcos Zapata dedicó a la misma. Cuando
la vimos la última vez (hace ya tiempo), no estaba igual de limpia y tampoco
fluía por sus caños la misma cantidad de agua.
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