Un nuevo monumento en las calles de Borja

         Hacía algunos días que no nos habíamos acercado a ese lugar, por lo que el pasado martes nos vimos sorprendidos por el cambio experimentado en el espacio existente, junto a la fachada del antiguo convento de dominicos y frente al Cine Cervantes.

         En 2010, el M. I. Ayuntamiento, tras derribar el cerramiento que allí existía, plantó unas viñas y un olivo, dedicando una placa a “Todos los hombres y mujeres del campo, que han trabajado nuestras tierras, en reconocimiento a su labor”.

         Las cepas se perdieron, poco a poco, pero el olivo creció, sirviendo ahora para la transformación del lugar.

         Junto al árbol se ha colocado la figura de un hombre, de tamaño natural, con la vara entre sus manos, disponiéndose a recolectar esas olivas con las que se elaborará el excelente aceite de nuestra Denominación de Origen.

         Lo único que echamos de menos, en éste y otros monumentos de nuestras calles, es una placa en la que se haga constar el nombre de su autor, como suele hacerse en otros lugares.

         Bonita iniciativa que no ha tenido aún el eco que merece, probablemente por haberse instalado en período electoral y no haber finalizado su acondicionamiento.