miércoles, 21 de diciembre de 2022

El belén del Auditorio a través de las fotos de Enrique Lacleta

 

         Al belén monumental del Auditorio de Santo Domingo le dedicamos dos comentarios, pero las nuevas fotografías que nos ha enviado Enrique Lacleta nos obligan a volver a él, dada la calidad de las mismas y las nuevas perspectivas que ofrece de este precioso belén del que hoy ofrecemos las imágenes tomadas desde lo alto, para dar a conocer otro día, los increíbles detalles captados por Enrique.


         Desde el coro de la iglesia y con teleobjetivo fueron realizadas estas fotografías, prestando especial atención a la parte frontal del belén, en la que han sido reproducidos varios edificios monumentales de la ciudad y de su entorno.




         Allí están el Arco de la Carrera; el palacio de los marqueses de González de Castejón, con su carpintería exterior de color verde (y no es una cuestión baladí en estos momentos); el convento de la Concepción que es la novedad de este año con la cual se completa la reproducción de la entrada a Borja por la avenida de Cervantes; y la iglesia de San Bartolomé.



         Sigue a la izquierda el palacio de los abades de Veruela en Bulbuente, con su torreón, actualmente restaurado y convertido en alojamiento turístico. Y la Casa de Aguilar, sede de nuestro Centro, con la alusión a nuestro Presidente, visible a través de una de las ventanas.




         Otra perspectiva en altura es la del cerro en el que se asienta la reproducción del castillo de Borja, con una alusión a las bodegas existentes en su entorno y la ermita de San Jorge. Esta última va ser restaurada y nos alegramos porque se trata de un templo medieval de especial importancia para nuestra ciudad. Para las bodegas se sigue reclamando, desde diversas instancias, la realización de un inventario y la adopción de medidas para proteger tan relevante conjunto.



         Detrás de nuestro castillo, el de Herodes y una población con casas de corte tradicional en los belenes, frente a la monumentalidad de las comentadas antes. Como puede apreciarse, en cada rincón hay detalles que pueden pasar desapercibidos en una rápida visita. Algunos de ellos han merecido la atención de Enrique, como podrán ver en el próximo artículo.



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