Libros recibidos 49

            Entre los diversos recibidos, en virtud del intercambio que mantenemos con diversas instituciones o por donación, dejamos constancia hoy de la obra Alfredo Palmero. Maestro Palmero, catálogo de la exposición que patrocinada por la Fundación de Cultura y Deporte de Castilla-La Mancha, tuvo lugar en 2001 en el Museo de Ciudad Real, con motivo del Centenario del nacimiento de este artista. La reproducción de gran calidad de las obras expuestas, va precedida de un estudio sobre su biografía e incluye al final una regesta de críticas a las diferentes exposiciones que realizó.

            También nos han remitido la obra Indumentaria Tradicional Manchega, de Luis Prado y Antonio Luengo, editada en 2008 por la Diputación de Ciudad Real, dentro de la Biblioteca de Autores Manchegos.

            La obra, fruto de un minucioso trabajo de campo de los autores, aborda diferentes aspectos históricos, económicos, sociales y artísticos relacionados con la vestimenta de las distintas zonas de esa comunidad autónoma, analizando además las distintas piezas que componen indumentaria tradicional. Todo ello acompañado de excelentes fotografías, entre ellas algunas de gran antigüedad, así como de un útil glosario de términos.

            Habíamos recibido ya y comentado el segundo número de la colección “Anejos Kalakorikos” que edita la Asociación de Amigos de la Historia de Calahorra. Ahora, nos han enviado el primer número que lleva por título Calahorra en el siglo XIV. Crisis y transformación de los poderes feudales, de Tomás Sáenz de Haro.

            Doctor en Historia Medieval y Profesor de Enseñanza Secundaria, el autor había abordado en su tesis doctoral el estudio de Calahorra en la Alta Edad Media. Ahora, ve la luz un nuevo trabajo sobre la historia de esa misma ciudad en un momento crucial en la evolución de las sociedades europeas. Como señala el Prof. D. José María Mínguez Fernández, Catedrático de Historia Medieval de la Universidad de Salamanca, que fue su tutor, esta obra constituye un excelente trabajo, por el rigor de los análisis y la solidez de sus conclusiones.

            El Dr. D. Miguel Ángel Pallarés es conocido por todos nuestros lectores por su trabajo como historiador y gran especialista en los orígenes de la imprenta en Aragón. Pero, junto a su faceta profesional, late también una intensa vena literaria que le permitió obtener el Primer Premio del III Certamen Literario de la Universidad de Zaragoza, en 1992, por La injuria de los tiempos y otros relatos, en total diez pequeñas obras en las que con singular maestría va dibujando ambientes sumamente dispares, en los que se entremezclan el reflejo de su tierra natal con mundos ya perdidos de la antigüedad, todo ello con la fuerza de un escritor consagrado, lo que no deja de sorprender en un joven de apenas 26 años, que era la edad a la que fueron escritos. Leerlos ahora, bastantes años después, nos permite disfrutar con aquellos mundos oníricos que brotaban de su fértil pluma, esperando que algún día vuelvan a cobrar forma, porque un escritor, al fin y al cabo, se debe a sus lectores.

            Finalmente, queremos reseñar la donación efectuada por D. Manuel Giménez Aperte de la obra de Georges Desdevises du Dezert sobre Don Carlos de Aragón, Príncipe de Viana, publicada en 1999 por el Gobierno de Navarra. En ella se hace referencia a la firma de una tregua de un año de duración en el enfrentamiento que Juan II de Aragón mantenía con el Príncipe de Viana. El acto tuvo lugar en Borja, el 3 de diciembre de 1454 y, aunque en el libro no se indica la razón de elegir este lugar fue porque, en nuestra ciudad, residía habitualmente la reina Dª Juana Enríquez, la segunda esposa del monarca aragonés y madrastra del príncipe.

            Borja era cámara de las reinas aragonesas y aquí residieron varias de ellas, entre las cuales se suele omitir a la reina Dª Juana que, sin embargo, fue una de las que tuvo mayor afecto a nuestra ciudad, donde estuvo largas temporadas. Teniendo en cuenta que era la madre de Fernando el Católico que, por cierto, también estuvo una semana en Borja, en 1492, camino de Barcelona, acompañado por la reina Isabel, es interesante recordarlo ahora que estamos conmemorando el V Centenario del fallecimiento de D. Fernando.