Que
las flores en balcones y ventanas constituyen un elemento fundamental del
ornato ciudadano es un hecho evidente que, sin embargo, en Borja no se prodiga.
De ahí nuestra insistencia en estimular comportamientos como el de los balcones
de una casa de la calle San Francisco y placeta de Cortes que lucen con
hermosos geranios.
Nos
gustaría difundir otros ejemplos como el de la sede del Consejo Comarcal en la
calle Nueva, a la que ya hicimos referencia pero que, ahora, con los geranios
crecidos aún está más bonita.
Creemos
que algo parecido podría hacerse en otros edificios de titularidad pública,
como la Casa de Cultura, en sus fachadas de la plaza del Mercado y calle de
Alfaro Malumbres, en donde las asociaciones que tienen cedidos locales, podrían
ocuparse de cuidar las flores.
Aunque
no tiene nada que ver con lo comentado anteriormente, también queremos hacer
alusión al cuidado y esmero que, de acuerdo con los distintos tiempos
litúrgicos, decora la iglesia conventual y el oratorio la religiosa encargada
de esa tarea en el convento de Santa Clara.
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