La catedral de Tarazona volvió a ser escenario de un importante acontecimiento eclesial, la ordenación (consagración se decía antes) y posterior toma de posesión del nuevo obispo de la diócesis D. Vicente Rebollo Mozos.
El obispo consagrante fue el
metropolitano zaragozano D. Carlos Escribano Subías quien le acompañó en su llegada
a la catedral, con su peculiar look. Junto a él marchaban también el Nuncio
Apostólico monseñor Bernardito Aúza y su predecesor en la sede turiasonense D.
Eusebio Hernández Sola OAR.
A las puertas del templo, donde había
sido recibido por el Deán D. Ignacio Tomás Cánovas, tras besar el bonito Crucifijo
de marfil filipino (como el Sr. Nuncio), en lugar del Lignum Crucis,
bendijo a los fieles con agua bendita.
Además del Deán y de otros miembros del
cabildo, en las fotografías dadas a conocer por Heraldo de Aragón, puede
verse al Párroco de Borja D. José María Sánchez Becerril, revestido con una
casulla en la que iba bordada la Cruz de doble travesaño del Santo Sepulcro.
En la ceremonia, sentado junto al nuevo
obispo, antes de su ordenación, estaba el Vicario General de la diócesis D.
Javier Bernal Gimeno, otro ilustre borjano.
Desde este blog queremos presentar nuestros respetos al nuevo prelado, deseándole la ayuda del Espíritu Santo en el desempeño de su ministerio pastoral para ser, como él manifestó, “el pastor que os merecéis y que necesitáis”.
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