En
los últimos días, Alberto Aguilera y Enrique Lacleta han estado trabajando en
la realización del inventario fotográfico de la antigua parroquia de San
Bartolomé, con el resultado de algunos hallazgos de interés.
Cuando
hablamos de “hallazgos” queremos señalar que se trata de obras de cuya
existencia no teníamos constancia y que no han sido publicadas, sin que ello
implique que fueran completamente desconocidas.
Entre
las sorpresas encontradas figura una serie de vestiduras litúrgicas de gran
calidad que se conservaban, cuidadosamente, en uno de los almacenes del templo.
Entre
ellas podemos destacar esta casulla, ricamente decorada con bordados de seda. A
la espera del correspondiente estudio, no queremos pronunciarnos sobre la fecha
de su realización.
Únicamente queremos ofrecer estas
bellas imágenes de los motivos decorativos, entre los que aparecen flores,
mariposas y serpientes en torno a los tallos.
No es la única pieza destacada pues, como hemos señalado, se conservan otras
de interés que merecería la pena mostrar en el magnífico Museo de la Colegiata,
en cuya sala VII ya se exhiben algunas vestiduras litúrgicas de indudable valor
y de diferentes épocas.
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