Como
continuación de la actividad desarrollada anteriormente, de la que ya
informamos en este blog, el Centro de Interpretación del Valle del Huecha de
Albeta programó para el día 1 de noviembre una nueva sesión dedicada a los
niños.
En esta ocasión se contó con la colaboración de Dª. Maite
Martín Val, residente en Ripollet, que por su condición de antigua profesora
supo sintonizar muy bien con los niños y niñas que asistieron.
Les
trajo unas calabazas que había hecho en la Asociación de Vecinos de Ripollet y
les narró la tradiciones vinculadas con la noche de ánimas, como la colocación
en su casa de un recipiente con agua y aceite sobrenadando en ella, donde su
abuela encendía una candela por cada miembro de la familia difunto.
Los niños escucharon
embelesados su narración y además les hizo una pequeña representación, a modo
de hechizo, para ilustrar el rato mientras ellos pintaban con esmero sus
propias calabazas.
Los
mayores ayudaron a los pequeños artistas
y copiaron las recetas propias de estos días (huesos de santo, panellets...)
que ella les dictaba. Después para terminar, fueron a buscar el pequeño tesoro
en forma de chucherías que se hallaba escondido por el Centro.
Como había oscurecido,
no se pudo hacer la tradicional fotografía junto al carro de la entrada del
Centro, por lo que los niños posaron, con sus trabajos, frente a la balanza del
pesaje, elemento de la tradición viva de Albeta.
Agradecemos a Dª. Eva
Frago Corao el envío de las fotografías y los datos con los que ha sido
elaborado este reportaje.
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