Cuando publicamos esta fotografía que nos había enviado un lector, sugerimos irónicamente que podía tratarse del dragón de San Jorge, escapado de la lanza del santo militar. Inmediatamente, D. Enrique Pelayo nos precisó que, probablemente, se trataba de un ejemplar de Salamanquesa común (Tarentola mauritanica).
Ahora, la misma persona que la fotografió
en la ventana nos remite esta otra imagen de la salamanquesa aunque, comparando
ambas, creemos que se trata de dos ejemplares diferentes.
Como es sabido, las salamanquesas
tienen la capacidad de regenerar la cola cuando, por diversas causas, la
pierden, pero la parte nueva carece de las crestas que tenía. En nuestra opinión,
en esta fotografía da la impresión de que la porción distal de la cola se ha
regenerado tras su amputación, dado que su aspecto es mucho más liso que el
resto. Sin embargo, la de la ventana, aunque a contraluz, muestra sus crestas a
lo largo de toda la cola.
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