Aunque
ya han transcurrido varios días desde el final de estas fiestas, Enrique
Lacleta nos ha hecho entrega de una serie de fotografías, correspondientes a la
presentación de los cabezudos restaurados que, por su interés, damos a conocer.
Tal
como figuraba en el programa de fiestas, este año se procedió a la presentación
de los nuevos cabezudos de la “Bruja” y el “Diablo”, desde el balcón de la Casa
Consistorial.
Decimos nuevos porque, en
contra de lo que en algunos lugares se ha señalado, han sido adquiridos en una
empresa especializada. Sí son iguales que los anteriores, entre otras razones
porque responden a un modelo comercial, similar al utlizado en otras
localidades. No obstante, su terminación es muy buena, tanto por lo que se refiere
a los propios cabezudos como al vestuario de quienes los llevan.
Desde
la plaza de España, los dos cabezudos, junto con el “Berrugón” y la “Morica” se
dirigieron al barrio del Carmen, acompañados por pequeños y no tan pequeños. En
el caso de estos otros cabezudos, debemos señalar que corresponden a modelos
originales, ya que fueron diseñados en 1889 por D. Baltasar González, aunque se
hace necesario restaurarlos pues, en la actualidad, se encuentran muy alterados
como consecuencia de repintados
inadecuados.
En
el barrio posaron bajo la imagen de la Virgen ante una nutrida concurrencia, ya
que fueron muchas las personas que les acompañaron a lo largo de todo el recorrido, en el que no
faltaron los caramelos para los niños.
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