El
artículo que publicamos ayer sobre el falso torero de Tabuenca ha despertado un
gran interés. En relación con el mismo se puso en contacto con nosotros el
escritor Antonio Cardiel, el autor de la biografía de Manuel Fernández López Pocapena, un torero que nunca existió.
La fotografía correspondía a otro torero, en este caso auténtico, Manuel
Fuentes Rodríguez Bocanegra, natural
de Córdoba. Nosotros, reproducíamos la “famosa” fotografía y un grabado que
volvemos a publicar, porque han sido varias las personas a las que les ha
llamado la atención el escaso parecido de ambas imágenes, así como el aspecto “femenino”
de quien aparece en la primera foto. En las páginas consultadas se le atribuye
a Bocanegra, pudiendo ser el grabado
de fecha posterior. No podemos pronunciarnos sobre esta cuestión, aunque queda
planteada.
También
nos visitó Antonio Aragón, incansable investigador de la historia de Ambel que
fue quien nos contó la anécdota del novillo que toreó Florentino Ballesteros en
esa localidad, la cual dimos a conocer el pasado 14 de julio.
Ahora,
Antonio nos ha entregado una recopilación de canciones infantiles reunidas
también en Ambel. Entre ellas, una que tenía como protagonista al propio
Florentino Ballesteros que, como recordarán nuestros lectores murió al ser
corneado en la plaza de Madrid el 22 de abril de 1917, cuando tenía 24 años.
Hemos
comprobado que la canción se interpretaba en diversos lugares, con variantes en
su letra. Aquí, ofrecemos la versión más coherente, aunque con anacronismos
como el de ese hijo que no llegó a tener:
De Zaragoza ha venido
un valiente novillero,
que se llama Florentino,
de apellido Ballesteros.
Ballesteros tiene un hijo
que se quiere meter fraile
y su madre le aconseja:
torero como tu padre.
Padre, prepara la capa
que me voy a torear
y mis amigos me dicen
que un toro me va a matar.
A mí no me mata un toro
ni tampoco otros cien toros;
a mí me matan las chicas
que tienen los ojos negros.
Florentino ya se ha muerto
ya lo llevan a enterrar
y encima la caja llevan
la capa de torear.
Como
hemos comentado el texto puede variar, pero es indudable que tuvo amplia
difusión, como expresión de la leyenda en la que se convirtió este gran torero
aragonés. Incluso en youtube hemos encontrado un vídeo con una divertida
interpretación de la cancioncilla a cargo de un entusiasta francés:
No hay comentarios:
Publicar un comentario