Publicaciones de otros Centros de Estudios

            A través de la Institución “Fernando el Católico” hemos recibido dos obras editadas por sus centros asociados. La primera de ellas es un díptico de 22 x 32 cm que lleva por título “La Vera Cruz y el Cáliz del Compromiso de Caspe”. En el mismo se reproducen con gran calidad las dos piezas más emblemáticas que conserva la ciudad, con una descripción de las mismas, a cargo de Domingo Albiac Berges y Teresa Thomson Llisterri, respectivamente. Ha sido editada por el Centro de Estudios Comarcales del Bajo Aragón Caspe que, el pasado año, conmemoró su LX aniversario.

            Ambas obras fueron donadas por el Gran Maestre de la Orden de San Juan de Jerusalén frey Juan Fernández de Heredia (c. 1310-1396). Nacido en Munébrega, mantuvo una especial relación con Caspe, donde quiso que reposaran sus restos en un bello sepulcro, destruido durante la pasada guerra civil.

            Del rico exorno de la colegiata de Santa María la Mayor pudieron salvarse estas dos singulares piezas de orfebrería. En el caso de la “Vera Cruz”, se da la circunstancia de que el relicario contiene uno de los mayores fragmentos conservados de la Cruz en la que fue crucificado el Señor. La usó como pectoral el Papa Clemente VII quien la donó al citado Gran Maestre y, para nosotros, tiene un interés especial pues de ella procede el Lignum Crucis que se conserva en la iglesia parroquial de Ambel, donde fue llevado por otro destacado miembros de la Orden Hospitalaria, el comendador frey Pedro de Monserrat.

            La otra obra de Arte es el llamado “Cáliz del Compromiso”, utilizado por el obispo de Huesca D. Domingo Ram en la solemne Misa celebrada en Caspe, el 28 de junio de 1412, como culminación de la reunión de compromisarios que eligieron como rey de Aragón a Fernando de Antequera, dando fin al problema sucesorio planteado tras el fallecimiento de Martín I.

            En el nudo del cáliz aparecen las armas de la Orden, la cruz recta de plata sobre campo de gules, y las personales del Gran Maestre que fue quien lo mandó fabricar en un taller de Aviñón, ciudad en la que había establecido su residencia, tras haber permanecido cautivo en Patras. 

            Por su parte, el Centro de Estudios Turiasonenses acaba de editar una importante obra de Jesús Criado Mainar y Olga Cantos Martinez, dedicada a El retablo mayor de la catedral de Santa María de la Huerta de Tarazona. El Prof. Criado es uno de los más destacados historiadores de Arte contemporáneos que cuenta con una dilatada trayectoria como investigador, fruto de la cual son los numerosos libros y artículos editados. Además es bien conocido por nuestros lectores ya que, en diversas ocasiones, ha colaborado con nuestra revista Cuadernos de Estudios Borjanos y, por otra parte, es coautor de una monografía dedicada a Juan de Lumbier, dentro de la colección del Museo de la Colegiata de Borja.

            Por su parte, la Dra. Cantos, además de historiadora del Arte, ha sido la responsable de la dirección de la restauración del citado retablo, llevada a cabo entre 2006 y 2011.

            Como señala el Prof. Aurelio A. Barrón García, en el prólogo del libro es la sintonía de ambos autores a la hora de dar forma a lo que no duda en calificar como “una obra definitiva sobre el retablo”.

            El primero de los capítulos está dedicado al encargo del mueble por el obispo turiasonense fray Diego de Yepes, en fecha por el momento desconocida, aunque en torno a 1605. Se analiza después su arquitectura y escultura, obra del escultor Pedro Martínez el Viejo y del ensamblador Jaime Viñola. Estableciendo paralelismos con otras obras anteriores, se hace referencia al programa iconográfico, para dedicar otro capítulo a los parámetro perceptivo del retablo, deteniéndose en su sistema constructivo y de la policromía posterior, con importantes aportaciones en torno a los procedimientos utilizados en la misma, en función de la perspectiva. Son también muy interesante las noticias que facilitan sobre la posible distribución del trabajo entre los pintores Agustín Leonardo y Gil Ximénez, a partir de los hallazgos durante el proceso de restauración.

            Todo ello, ilustrado con excelentes fotografías de las distintas partes de esta excepcional obra artística, con detalles del antes y el después de la restauración. Ellas nos permiten conocer con precisión aspectos que, a simple vista, pasan desapercibidos. En este sentido nos ha llamado la atención del ángel que remata el retablo (Fig. 11), al que denominan “Ángel Custodio”, el cual porta en su mano izquierda una corona. Aunque le falta en la derecha la espada, esta representación iconográfica suele relacionarse con los ángeles custodios de las ciudades que eran representados con espada y el escudo correspondiente a la población sobre la que ejercen su protección o una corona, en el caso de las ciudades de realengo, como era el caso de Tarazona.

            Finalmente, queremos hacer referencia a la obra de Jesús Catalán Sesma que lleva por título Plantas medicinales de Monlora y las Cinco Villas Orientales y que ha sido editada por el Centro de Estudios de las Cinco Villas, en colaboración con el Ayuntamiento de Luna.

            El autor, natural de esa localidad y farmacéutico de profesión, ha realizado un ingente trabajo de catalogación de las plantas de esa zona, con interés terapéutico, que ofrece en esta obra de 446 páginas en la que incluye 413 fichas con su correspondiente descripción, hábitat en el que cada planta crece, época de floración, propiedades medicinales y, en muchos casos, información complementaria. Todo ello ilustrado con buenas fotografías a todo color, de manera que el libro constituye un excelente instrumento de consulta para todos los interesados en esta materia y para quienes deseen adentrarse en su conocimiento para los que se inserta al final un glosario de términos botánicos.

            Como en los antiguos libros, va precedido por una serie de prólogos suscritos por el obispo de Huesca y Jaca, D. Julián Ruiz Martorell; por la que hasta hace poco era Presidenta del Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos de España, Dª. Carmen Peña López; por el Presidente del Colegio de Farmacéuticos de Zaragoza, D. Ramón Jordán Alva; por el Presidente del Centro de Estudios de las Cinco Villas, D. Carlos Pellejero García; y por el Alcalde de Luna D. Luis Miguel Auría Giménez.