El 8
de febrero de 1738, Felipe V concedió la Capellanía Real de la colegiata de
Santa María de Borja a D. Nicolás Lázaro
San Gil, de la que tomó posesión el 1 de marzo de ese mismo año.
Esta
capellanía era una reminiscencia de época medieval, cuando el castillo de Borja
disponía de guarnición que era atendida por un capellán, en la pequeña iglesia
que existía en el Cinto y de la que todavía no se han encontrado restos. Al
desaparecer las circunstancias que motivaron su creación, se logró que la capellanía
fuera mantenida en la colegial, reservándose su provisión el Rey, para
agradecer determinados servicios. En este caso, era evidente la relación de los
San Gil con la causa borbónica, por lo que el nombramiento de Nicolás atendía a
las demandas de la familia, buscando acomodo para uno de los muchos hijos que
tuvo el matrimonio formado por D. Juan Lázaro Pelín y Dª Josefa San Gil del
Arco.
Se da
la circunstancia de que Nicolás todavía no era sacerdote. Fue ordenado al año
siguiente, celebrando su primera misa en el Santuario de Ntra. Sra. de Rodanas,
el 27 de septiembre de 1739. Tenía en esos momentos 24 años, pues había nacido
en Borja el 10 de septiembre de 1715.
El 8
de febrero de 1897 nació en Borja D.
Emiliano de Castro Bonel, uno de los hijos menores de D. Enrique de Castro
Pérez que vino a Borja como Registrador de la Propiedad y aquí contrajo
matrimonio con Dª Matilde Bonel Pellicer, que era de Bulbuente.
Emiliano
cursó la carrera de Arquitectura en Madrid, bajo los cuidados de su hermano
mayor Honorato (que llegaría ser Diputado de las Cortes). En 1927, ingresó por
oposición en el Cuerpo de Arquitectos de Hacienda y, al mismo tiempo, contó con
despacho propio en el capital española, donde supo granjearse un gran
prestigio.
Edificio
existente en la calle Príncipe de Vergara de Madrid construido por él
|
Como
prueba de su actividad, hemos revisado las licencias de obras concedidas por el
Ayuntamiento de Madrid, entre julio y noviembre de 1935. Entre ellas, figuran
las correspondientes a los siguientes edificios privados, construidos con
proyecto de Emiliano Castro: Julio: Francisco Ricci 7 (del que era
propietario); Rodríguez San Pedro 47 (también aparece como propietario); Divino
Vallés 18; Escosura 29; Conde de Xiquena 15; Galileo 59; Juan de Urbieta 22;
Londres 22; Jaime el Conquistador 19; Donoso Cortés 41; y Goya 46.
Por lo que respecta a
Borja, hay que señalar que fue el autor del proyecto para la construcción del
Grupo Escolar, en tiempos de la Dictadura, el cual donó al Ayuntamiento, sin percibir
ninguna retribución por su trabajo. Al proclamarse la II República, aunque los
terrenos ya había sido adquiridos, las obras no había comenzado y, para evitar
que por sus afinidades republicanas pudiera interpretarse que se beneficiaba de
la nueva situación, no quiso hacerse cargo de las mismas, teniendo que ser
nombrado otro arquitecto.
Al
terminar la guerra civil, marchó al exilio, al igual que otros miembros de la
familia. Aquí fue sometido a expediente de depuración, siendo condenado a
inhabilitación perpetua para el ejercicio de la profesión en cargos públicos,
directivos y de confianza, así como a inhabilitación durante veinte años para
el ejercicio privado de la profesión.
No
obstante, regresó a España en fecha que desconocemos y, en 1969, ABC daba
cuenta de su participación en el homenaje tributado a D. Joaquín Alfaro por la
Peña Moncayo, con asistencia del entonces Alcalde de Borja D. Vicente Compans
Manero. Emiliano de Castro fue el encargado de hacer entrega al homenajeado de “una
valiosa caja de plata”, regalada por los miembros de esta peña, fundada en
Madrid por D. Anastasio Navarro, en la que se reúnen destacadas personalidades
aragonesas residentes en la capital.
No hay comentarios:
Publicar un comentario